Apagado completamente el incendio forestal de Canejan (Vall d'Aran, Lleida). El fuego se originó en esta población del Pirineo catalán y ha afectado a un total de 335 hectáreas de alta montaña. También han quemado tres edificaciones de montaña durante las dos semanas que las llamas han estado activas, desde que se iniciaron la noche del jueves 16 de marzo. Sin embargo, no fue necesario hacer desalojos, porque el área que quemaba no llegó a las poblaciones cercanas. La zona calcinada, próxima a Francia, era de difícil acceso pero la meteorología no jugó en contra de los equipos de extinción encabezados por los Pompièrs d'Aran y varias dotaciones de los Bombers de la Generalitat. Ambos cuerpos actuaron en el flanco derecho los últimos días tras una reactivación que se produjo el martes pasado, pero fue estabilizado el jueves y se dio por totalmente controlado a principios de semana.
Las últimas jornadas de trabajos para extinguir el incendio se han basado en la vigilancia con el objetivo de evitar que algunos puntos calientes se reactivaran. Durante este periodo el Conselh Generau d'Aran suspendió temporalmente todos los permisos para hacer fuego, mientras cinco dotaciones terrestres, dos más de aéreas y un vehículo de mando tanto de los bomberos araneses como de los de la Generalitat luchaban para apagar las llamas. No se registraron nuevos focos en la Vall d'Aran, pero sí que hubo una reavivación en el flanco derecho del incendio de Canejan este martes hacia las cuatro menos cuarto de la tarde, cuando ya afectaba a unas 280 hectáreas. Esto hizo reactivar más dotaciones, pero no necesitaron pedir ayuda extraordinaria a Francia, a otros territorios o a la Unidad Militar de Emergencias (UME), vista que la virulencia del fuego no llegaba a los máximos que se están observando en las provincias de Castellón, Teruel, Lugo o en el Principado de Asturias.
Incendio en el Montmell: controlado y estabilizado a última hora de la tarde
Además del incendio de Canejan que ha calcinado un total de 335 hectáreas de alta montaña, este jueves por la tarde se originó un nuevo fuego forestal en Catalunya. En torno a las cinco de la tarde las llamas cubrían una masa boscosa en el municipio del Montmell, en el Baix Penedès. Los Bombers de la Generalitat se desplazaron con 19 dotaciones terrestres y cinco medios aéreos de unidades provenientes de los parques de El Vendrell, Valls y Montblanc, y también con el Grup de Recolzament d'Actuacions Forestals (GRAFO) de Tarragona y Manresa. Hasta la zona efectivos de Agents Rurals, Mossos d'Esquadra y del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) realizaron tareas de apoyo y vigilancia. La zona era de difícil acceso y en un principio se temía que se pudiera extender y afectar a una extensión más amplía. Pero en un par de horas fue estabilizado.
Ahora, este viernes de madrugada se ha dado por controlado, después de conseguir detener la evolución del incendio en la cabecera y hacer descender la intensidad de la cola, principalmente con los medios aéreos. El origen del fuego se sitúa en la zona del Fondo de Cal Grasset de la Serra de la Torre de Montmell. Aun así, los Bombers de la Generalitat todavía continúan con dos dotaciones trabajando en el lugar para evitar que el viento u otros cambios meteorológicos puedan reavivar las llamas y para extinguirlo completamente, como se ha conseguido realizar con el incendio forestal de Canejan, en la Vall d'Aran, que ha acabado con 335 hectáreas de bosques de alta montaña.