La Fiscalía de Barcelona ya tiene una fiscal especialista que se dedicará en exclusiva a la tutela y protección de todas las víctimas en el procés penal, y especialmente los menores, las personas mayores y las personas con discapacidad, una tarea como la que ya se hace desde la Sección Especializada de Violencia contra la Mujer. La fiscal Silvia Armero asumirá esta función centrada en informar a la víctima de sus derechos y de coordinación entre las fiscalías de la provincia y las de área, así como los cuerpos policiales. El reto es actuar de forma inmediata cuando llegue una denuncia por abusos físicos o patrimoniales, con la petición urgente de medidas cautelares como el bloqueo de cuentas o el nombramiento de un defensor judicial. El fiscal Antoni Torres asumirá las diligencias del ámbito civil.
La Fiscal de Barcelona, Neus Pujal, ha explicado que este refuerzo es necesario ante el aumento de casos de abusos físicos y patrimoniales y de violencia institucional a la gente mayor que llega a la Fiscalía, según ha explicado este viernes en un encuentro con periodistas. En este sentido, ha recordado que se han presentado querellas contra residencias de personas mayores, en el marco de la pandemia por la Covid-19. Pujal ha insistido en que se actuará siempre respetando la autonomía de la persona, aunque también se tiene que valorar si necesita un apoyo para su día a día, lo que actualmente se llama la curatela.
Alertados por los servicios sociales
Los servicios sociales y profesionales de los CAP son los que alertan la mayoría de las veces de estos abusos a la Fiscalía, que espera que las notarías y los bancos colaboren más y alerten si detectan posibles abusos, de que pueden llegar a ser delitos. Por ejemplo, Pujal ha detallado que cada vez más les llegan casos de personas mayores solas que han cambiado la titularidad de su cuenta o, incluso del piso a favor del cuidador o de un familiar. "Son muy vulnerables y pueden acabar sin nada", ha afirmado.
Actualmente, la Fiscalía trabaja para cuantificar y separar las denuncias por estafas y abusos patrimoniales, además de los físicos y de maltrato. Un total de 1.456 personas mayores de 65 años denunciaron haber sufrido violencia doméstica el año 2023, según los datos de los Mossos de Esquadra. Así, cuándo un caso llegue a la Fiscalía se analizará si hay que pedir medidas cautelares por la vía civil, y desde la vía penal se investigará y se acompañará a la persona afectada.
"La Fiscalia de Barcelona es pionera en protección a la víctima, con iniciativas desde 1996," ha asegurado la fiscal Armero y ha añadido que con esta coordinación se quiere dar un paso más en su atención y que los casos no queden parados.
Acompañar a los juicios
Las agresiones sexuales a menores o si sufren algún tipo de violencia que se detecte desde la Fiscalía de Menores también serán derivados a la fiscal de protección para que se hagan diligencias de investigación. En este sentido, el Ministerio Público comparte las propuestas de una reciente guía, hecha desde el Centro de Estudios Jurídicos, para operadores jurídicos para saber como interrogar a menores cuándo llega el juicio. Por ejemplo, se aconseja no tratar de usted a un menor de 16 años para mantener la proximidad, aunque recientemente una sección de la Audiencia de Barcelona riñó a una fiscal por hacerlo.
La Fiscalía quiere establecer mejores mecanismos de comunicación con las víctimas e informarlas de los avances en el procedimiento penal o de sus casos. Por eso, la Fiscalía también quiere extender el acompañamiento a víctimas vulnerables a los juicios, como desde 1995 realizan de forma coordinada con la Fiscalía una unidad de la policía catalana en los casos de víctimas de agresiones sexuales.
Y es que a pesar de la normativa vigente, como el Estatuto de la Víctima, todavía hay juicios en la Audiencia de Barcelona que las víctimas desconocen sus derechos y ningún operador jurídico les informa de nada.