El 12-O es un día de tradiciones: desfile militar en Madrid con pifia incluida, manifestación españolista en Barcelona y contramanifestación antifascista, pero también la reunión de los ultras en la capital.
Este año, esta tuvo lugar en la plaza Sant Jordi, en Montjuïc, donde se reunieron poco más de un centenar de personas equipadas con banderas españolas, franquistas y nazis. Durante el encuentro también quemaron esteladas. Además, algunos de los participantes a la concentración han aprovechado la ocasión para vender merchandising como banderas, pegatinas réplicas de objetos bélicos. Las salutaciones fascistas han sido habituales durante el acto.
Posible delito de odio
Los Mossos d'Esquadra han identificado uno de los manifestantes que asistió a la movilización ultra de este 12 de octubre en Montjuïc, por sus gritos amenazantes contra la comunidad judía. El cuerpo policial ya ha asegurado que la Unidad Central de Delitos de Odio y Discriminación iniciaría una investigación y se abrirán diligencias penales por delito de odio.
Por su parte, el Ajuntament de Barcelona ha decidido denunciar a la fiscalía de delitos de odio este encuentro. La denuncia recoge que los manifestantes hicieron cánticos fascistas, antisemitas y proclamas como 'menas no'. Estos podrían considerarse cometidos por una persona jurídica, Democracia Nacional, la organizadora del acto, porque en todo momento se "favoreció, amparó y en todo caso toleró" estas actitudes delictivas.