La frontera del Tarajal que separa Ceuta de Marruecos ha amanecido este lunes en calma después de una noche de cierres intermitentes del paso fronterizo como consecuencia del acercamiento de decenas de migrantes que fueron repelidos por las autoridades marroquíes. El paso fronterizo presenta el habitual devenir fluido de personas y vehículos. Se da una situación de normalidad, si bien se ha advertido una menor presencia de embarcaciones en el mar para el control de las entradas. En el lado español de la valla no se aprecian esta mañana grupos de personas subidos a la colina situada junto a la frontera, como ocurría durante toda la jornada del domingo, si bien tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional permanecen en situación de alerta. Tampoco se ha producido ningún acercamiento similar en los 8,2 kilómetros de perímetro fronterizo terrestre.
La situación de “calma tensa”, como la ha definido un agente policial en declaraciones a EFE, se produce después de un domingo de constantes cierres intermitentes de la frontera, sobre todo en la noche de ayer, debido a los enfrentamientos que se estaban produciendo al otro lado de la frontera entre la Gendarmería marroquí y los migrantes que deambulaban por el entorno del Tarajal. La presión en la población de Castillejos, distante unos dos kilómetros de la frontera, se ha mantenido prácticamente durante toda la noche con el lanzamiento de piedras sobre los agentes, los cuales han usado gases lacrimógenos para contener a los migrantes.
Seis jóvenes detenidos
El único incidente que se ha dado este lunes ha sido la detención de un grupo de seis migrantes, todos ellos jóvenes varones marroquíes, que han sido interceptados por las autoridades marroquíes esta mañana sobre las 11:00 horas, cuando se habían lanzado al mar desde las costas de Castillejos para alcanzar a nado la playa del Tarajal, según fuentes policiales españolas. A pesar de las fuertes medidas policiales, los seis nadadores se han lanzado al mar, pero finalmente han sido interceptados por Marruecos antes de que pudieran alcanzar la costa ceutí. La policía lo considera un intento de entrada aislado.
El Gobierno valora el "gran esfuerzo" marroquí
La Delegación del Gobierno en Ceuta ha destacado este lunes que las labores de control y contención llevadas a cabo por Marruecos han evitado que en toda la jornada del domingo y esta madrugada se haya producido alguna entrada de migrantes a la ciudad ceutí, ni a nado ni tampoco por el doble vallado fronterizo. Asimismo, las autoridades españolas han puesto en valor la estrecha colaboración con Marruecos y el "gran esfuerzo" que se ha realizado en el lado marroquí durante una jornada dominical de constante presión migratoria y de acercamientos a la frontera. Las fuentes han advertido de que la frontera del Tarajal volverá a sufrir cierres intermitentes si es necesario para el control de las entradas.