La Generalitat ha aprobado inicialmente el Plan Director de Urbanismo (PDU) de revisión de suelos no sostenibles del litoral de Girona, que impedirá la construcción de 15.037 viviendas en espacios de interés natural y paisajístico de la Costa Brava.
Lo ha aprobado la comisión territorial de urbanismo en una sesión extraordinaria este lunes presidida por el secretario de Hábitat Urbano y Territorio de la Generalitat, Agustí Serra, y a la que han asistido alcaldes y representantes de los 22 municipios que abarca el plan, ha informado la Generalitat en un comunicado.
Serra ha explicado que la aplicación de las directrices del PDU supondrá "dejar de emitir 619.468 toneladas de CO2 a la atmósfera, una reducción del 61% respecto las previsiones del planeamiento vigente hasta hoy".
El plan ha revisado la sostenibilidad de 202 suelos de 17 municipios de la Costa Brava donde se podría construir que no tienen su planeamiento adaptado al contenido del Plan territorial parcial de las comarcas gerundenses.
Extinción, modificación y mantenimiento
De estos 202, ha propuesto que 91 de los cuales vuelvan a formar parte de la red de espacios abiertos, que suman un total de 981 hectáreas de superficie y donde se impide la construcción de 12.804 viviendas.
El plan apuesta por cambiar las condiciones de desarrollo de 50 ámbitos, que suman 497 hectáreas y tienen un potencial de 5.516 viviendas, lo que impide -con los cambios introducidos- la construcción de 2.197 viviendas.
También propone ámbitos a mantener porque no entran en contradicción con los criterios del plan y, por tanto, no se modifican, pero se les pone la condición que cumplan con unas directrices de integración paisajística cuando se desarrollen, y afecta a un total de 61 ámbitos que suman 436 hectáreas, con un potencial de 6.153 viviendas.
Serra ha señalado que se "elimina la posibilidad de construir 15.037 viviendas, cerca del 50% de los 30.843 de los previstos", sumando los ámbitos que se extinguen y los que reducen las viviendas previstas.
Además de revisar los 202 suelos de extensión, el PDU fija unas nuevas directrices de integración paisajísticas que se tendrán que cumplir en los 22 municipios afectados a la hora de construir viviendas aisladas y con pendiente.
La Comisión de Urbanismo ya aprobó en enero una moratoria de licencia de obras e instrumentos de planeamiento para evitar que se pudiera urbanizar algún sector, y que afectó a 1.120 hectáreas de superficie con 43 suelos donde se podrían construir más de 3.000 viviendas.
Un mes después la Generalitat amplió la suspensión a otras 955 hectáreas más: 69 sectores residenciales, donde se podrían construir 12.020 viviendas, y 11 de actividad económica en suelos urbanizables, a más de ocho sectores de suelo urbano no desarrollado situados a primera línea de mar con capacidad para 237 viviendas.
Con la aprobación inicial del PDU se prolonga la moratoria para todos aquellos ámbitos que se propone extinguir o modificar, y se mantendrá hasta la aprobación definitiva del plan.