El Grup Especial d'Intervenció (GEI) de los Mossos d'Esquadra es una de las unidades más secretas de la policía catalana. Unos cuarenta agentes -pronto serán más- bajo las órdenes de un inspector y un subinspector que tienen la capacidad, en poco tiempo, por tierra, mar o aire, de desplegarse en todo el país en situaciones críticas y como último recurso. ElNacional.cat ha podido presenciar uno de los entrenamientos que, en un lugar secreto de Catalunya, los efectivos del GEI realizan, como rutina casi diaria, para estar preparados para el día que sea necesario actuar. El entrenamiento, en cualquier lugar, teniendo en cuenta que las situaciones de riesgo pueden aparecer en todas partes, es la pieza clave de esta unidad que este 2024 cumplirá, oficialmente, 40 años de vida.
El GEI de los Mossos es la unidad capacitada para responder a situaciones de máximo riesgo, con personas armadas, y con capacidad de hacer daño, en cualquier lugar de Catalunya. En pisos, en naves industriales, en un centro comercial o en medio de la calle. En diferentes turnos, y siempre con un equipo de guardia preparado para responder en pocos minutos, los operadores del GEI de los Mossos entrenan situaciones que todos esperan que nunca tengan que afrontar en la realidad.
Hoy, con ElNacional.cat de invitados, y bajo todas las medidas de seguridad que necesita una unidad como esta, simulan entradas en pisos y desplazamientos en el interior de grandes espacios con el objetivo de mejorar, si cabe, la técnica para realizar búsquedas de personas hostiles.
Lamentablemente, el Grup Especial d'Intervenció cada vez tiene más trabajo. Si bien hace años el 80% de su jornada era entrenarse, ahora los servicios se han disparado. Aunque no todos son críticos, la necesidad de desplegar el GEI en incidentes con personas armadas ha crecido. Abatir al pistolero de Tarragona, liberar a dos personas chinas en la calle Amigó de Barcelona, neutralizar a un tirador activo en una masía del Ripollès o detener al pistolero de Sant Hipòlit de Voltregà, que había matado a un menor de edad, son algunas de las activaciones recientes y quizá más mediáticas. Otras no han llegado a conocerse. La discreción, para garantizar la seguridad, es también uno de los valores de esta unidad de élite de la policía catalana.
Además de responder a incidentes críticos y sobrevenidos, la creciente tensión social y el incremento de grupos narcoterroristas en nuestro país, ha hecho que las unidades de investigación de todo el país también activen el GEI cuando saben que los grupos criminales que quieren detener pueden tener armas de fuego. El trabajo se ha disparado, aseguran los operadores a ElNacional.cat. Además, también son activados en servicios preventivos, y cada vez también con más asiduidad. Después de Sant Joan, en Girona, un equipo del GEI se desplegó en el barrio de la Font de la Pólvora por si era necesario actuar, después del asesinato del AK-47 donde un hombre -aún no detenido- mató a dos e hirió a dos más. El GEI de los Mossos también participa en operativos especiales como los recientes partidos de alto riesgo del FC Barcelona -fue la primera vez que estaban de manera visible en la calle-, en conciertos o en la protección de personalidades que visitan nuestro país.
Preparados para ser activados en cualquier lugar de Catalunya
Por su capacitación, los operadores del Grup Especial d'Intervenció pueden ser activados para trabajar en cualquier espacio de Catalunya, para responder a riesgos conocidos o desconocidos. El entrenamiento es clave, recuerda el subinspector a ElNacional.cat. Preparados para responder a incidentes con presencia de armas y abatir a los hostiles, esta unidad de los Mossos es una de las más desconocidas. Poca gente sabe quién forma parte. Los integrantes no explican que son GEI y todas las operaciones las realizan con el rostro protegido. Son el último recurso de la policía y su objetivo es ganar, utilizando, de manera proporcional y gradual, la fuerza, pero ganar. Entre ellos, trabajando, se llaman con nombres ficticios, que ya han interiorizado. "Algunas veces hemos tenido que detener a gente conocida, vamos con la cara tapada, pero por los ojos y la voz, nos pueden reconocer, dirigirnos entre nosotros con estos nombres nos permite poner más distancia", explica el subinspector. La seguridad, personal y del equipo, es la clave del GEI.
Entrenamiento duro del GEI de los Mossos
Los entrenamientos del GEI son duros. Además de lo que ha podido grabar ElNacional.cat, en la misma ubicación realizan otros tipos de ejercicios para mejorar los desplazamientos y las búsquedas, también bajo fuego. Pero los entrenamientos también se realizan en entorno acuático, por si es necesario asaltar una embarcación, en las recientes capacidades marítimas que está explotando el cuerpo de los Mossos d'Esquadra, y también con la colaboración del Àrea Aèria, con traslados y descensos desde el helicóptero policial.
Las tareas más complicadas que deba afrontar la policía de Catalunya serán encargadas a este grupo de hombres de los que solo conocemos un nombre inventado y el color de sus ojos, pero que podrían ser tu vecino. Y están preparados para defender la libertad y neutralizar el peligro cuando las cosas ya se han complicado demasiado.
