Después de una noche de trabajo los Bombers han dado por estabilizado el incendio que quema en Calafell, en el Baix Penedès. Sobre la medianoche los Bombers ya permitieron que la treintena de personas evacuadas de la urbanización Mas Mel por el fuego volvieran a casa y, por lo tanto, no ha sido necesario que ningún vecino pase la noche en el polideportivo. A última hora de ayer martes trabajaban 54 dotaciones y ya preveían actuar toda la noche. En un tuit, los Bombers han explicado este miércoles a primera hora de la mañana que, aunque el fuego está estabilizado, todavía trabajan 30 dotaciones y una setentena de Bombers.

Fin del confinamiento

Concretamente, los Bombers han dado el fuego por estabilizado a las 5:45 de la mañana (un fuego pasa por cuatro fases: activo, estabilizado, controlado y extinguido) y, a partir de ahora, trabajarán para controlarlo. La actividad no se ha detenido en el centro de mando y los profesionales trabajan en la zona sin descanso. Según han explicado los Bombers a El Nacional, en breves instantes se levantará el confinamiento. En la zona de Mas Mel las llamas llegaron al exterior de las casas. En la zona de Bellamar, la segunda urbanización, las llamas entraron en jardines y quemaron vallas de casas.

Foto: Guillem R.S.

Este martes por la noche, el alcalde del municipio, Ramon Ferré, agradecía las tareas de los cuerpos de emergencias, y celebraba estar "en buenas manos". Preguntado por un vecino sobre la presencia de sotobosque en la zona del incendio, Ferré explicó que el Ayuntamiento chocaba con la dificultad de los propietarios privados (y pedía un cambio a las leyes para poder actuar con más celeridad) y admitía que las condiciones climáticas "atípicas para la época" habían hecho que el sotobosque fuera similar al que hay en julio. El consistorio acostumbra a limpiar estas zonas los meses de abril y mayo.

Foto: Guillem R.S.

El miedo de los vecinos

Una de las vecinas evacuadas de la urbanización Mas Mel, Laura Parra, explicaba esta noche a la ACN que salía del gimnasio y que había visto las llamas, y que por el viento se había dado cuenta de que iban en dirección hacia su casa. Enseguida ha subido a buscar algunas pertenencias y ha avisado a su marido, "pero ya no lo han dejado subir". Parra no sabía si las llamas habían afectado su casa, pero suponía que el jardín sí. Los Bombers han explicado que ninguna edificación ha resultado afectada y que el confinamiento está a punto de acabar.