El incendio forestal declarado este jueves en el término municipal de Villanueva de Viver sigue quemando con fuerza y afecta ya a 4.000 hectáreas situadas entre Castellón y Teruel. Unas 1.500 personas continúan desalojadas, que han tenido que pasar una segunda noche fuera de casa. Entre ellas, los residentes del centro para personas mayores de Montán, así como vecinos de los municipios de Fuente de la Reina, Los Calpes, Los Cantos, La Monzona, Puebla de Arenoso, Mantenejos y Arañuel. Durante la noche de este viernes el flanco de Teruel se ha podido frenar, pero las llamas siguen quemando sin control la zona de Castellón, aunque el secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, José María Ángel, ha asegurado que la evolución del incendio es favorable y el fuego no ha llegado hasta la carretera CV-195.
Durante la mañana de este sábado se han incorporado a las tareas de extinción una veintena de medios aéreos, con los que ya son más de 500 efectivos los que trabajan sin descanso para evitar la propagación del fuego. Diez unidades forestales, cuatro brigadas forestales, once autobombas y siete vehículos de apoyo de Emergencias de la Generalitat Valenciana continúan en el lugar del incendio, trabajando conjuntamente con las siete cuadrillas terrestres, tres helitransportadas, siete autobombas y doce Agentes de Protección de la Naturaleza que ha enviado el Gobierno de Aragón. Está previsto que a lo largo del día lleguen refuerzos de otras regiones, así como más efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
El fuego está quemando una zona con mucha masa forestal
La consellera de Justicia de la Generalitat Valenciana, Gabriela Bravo, ha informado de que la gravedad del incendio y la fuerza de las llamas ha obligado durante esta noche del viernes a retirar varios medios terrestres de la zona, debido al grave riesgo que el fuego presentaba para la vida de los bomberos que trabajan. Según las últimas informaciones, las llamas se han encallado en el Barranco de la Maimona, un área con mucha masa forestal que aviva las llamas y dificulta todavía más las tareas de extinción. "La estrategia es actuar con los medios aéreos, porque el fuego está en un barranco con mucha profundidad y combustible", ha indicado la consellera.
A pesar de esta situación, un ligero cambio en las condiciones meteorológicas ha supuesto una ralentización en la propagación del incendio. Y es que la gran carga de humedad de esta pasada noche y la ausencia de viento han conseguido que los efectivos puedan parar las llamas antes de que estas llegaran a la carretera CV-195, que comunica las localidades de Montán y Montanejos.
Una mala quema agrícola, la principal hipótesis detrás del incendio de Castellón y Teruel
Las primeras hipótesis apuntan a una mala práctica de quema agrícola que ha podido originar el fuego, que por sus características ya se considera el primer Gran Incendio Forestal (GIF) de este año en el estado español. A estas alturas, la Guardia Civil está investigando a cuatro brigadistas municipales de Villanueva de Viver por su presunta implicación en el origen del incendio.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que pondrá a disposición de la Generalitat Valenciana "todos los recursos necesarios" con el fin de conseguir la extinción de este incendio. Y ha remarcado el carácter inusual del fuego, que se está produciendo fuera de temporada. "Se tiene que extremar la precaución y pondremos todos los recursos para la recuperación de la zona", ha explicado Pedro Sánchez. Los últimos años han sido de mucha sequía, lo cual ha afectado a las condiciones de agua y temperatura de esta área, generando una gran vulnerabilidad de los espacios naturales ante los incendios.