Finalmente, han empezado las obras del centro abierto de la Zona Franca de Barcelona, con una capacidad para 800 personas en régimen abierto, es decir, en la recta final de la condena. La exconsellera Lourdes Ciuró anunció que Justicia destinaba 36,6 millones de euros al proyecto y que el reto es que el nuevo equipamiento entre en funcionamiento en el 2025. Este jueves se han podido ver los primeros movimientos de tierras. Con el cierre de la prisión Modelo -impulsado por el exconseller Carles Mundó, en junio 2017-, Barcelona no tiene ningún centro penitenciario con personas que cumplen condena o preventivas, y del centro de la Zona Franca se decidió, con ERC al frente de Justicia, que al final no fuera una prisión convencional ante la bajada de reclusos por los cambios en el Código Penal, entre otros factores. Actualmente, las prisiones catalanas acogen a 7.747 personas (552 mujeres), de las cuales unas 1.300 en régimen abierto o tercer grado.

Las nuevas instalaciones para internos en semilibertad ocuparán un solar de 6.500 metros cuadrados, delimitados por la esquina de la calle A con la calle 1 de la Zona Franca. El centro servirá para cerrar definitivamente la antigua prisión de Trinitat Vella de Barcelona, que ahora acoge penados en tercer grado, y que irán al nuevo centro de la Zona Franca, como también los reclusos de la unidad abierta de hombres que ahora funciona en el edificio de la prisión de Mujeres de Barcelona (Wad-Ras). Entre los dos centros abiertos suman unas 600 plazas. En otros terrenos de la Zona Franca también está proyectada la construcción de la nueva prisión de mujeres, prevista para el 2027 y que permitirá cerrar la actual y bastante antigua prisión de mujeres de Wad-Ras. Por ahora no hay nada concretado y la nueva consellera de Justicia, Gemma Ubasart, tendrá que decidir si la aprueba e impulsa.

Movimiento de tierras, en el solar del futuro centro abierto, este jueves. Foto: Carlos Baglietto

Las adjudicaciones, el mayo pasado

La sociedad pública Infraestructuras de la Generalitat de Catalunya adjudicó el mayo pasado la construcción del centro abierto de la Zona Franca, dividido en dos lotes. La obra civil y arquitectura del nuevo centro penitenciaria se ha adjudicado a FCC Construcción, S. A. por un importe de 19.175.846 euros y para ejecutar en un plazo de 29 meses. Y las instalaciones del centro a la unión temporal de empresas Elecnor Servicios y Proyectos, SAU & Sogesa Instalaciones Integrales, por un importe de 10.241.053, que se tiene que ejecutar en un plazo de 24 meses.

La construcción del centro abierto de la Zona Franca permitirá que, en los terrenos liberados por el cierre de la Trinitat por parte de la Generalitat, se puedan construir viviendas de protección oficial, equipamientos y zonas verdes. Es una operación que hace años que esperan los vecinos de la Trinitat, e incluso, hay un proyecto para conservar una parte del penal para las entidades y como espacio de memoria, ya que además de las reclusas ordinarias, sirvió para reprimir disidentes y estudiantes.

Trabajadores, en el solar de la Zona Franca, este jueves. / Foto: Carlos Baglietto