Investigadores del Hospital de Sant Pau, liderados por el neurólogo Ricard Rojas-García, han identificado una nueva mutación en el gen ARPP21 que podría ser causante de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), una enfermedad neurodegenerativa devastadora que han visibilizado figuras reconocidas que lo han sufrido o la sufren como el físico teórico Stephen Hawking o el exfutbolista Juan Carlos Unzué. En concreto, el hallazgo se trata de una mutación compartida (c.1586C>T; p.Pro529Leu) en el gen ARPP21 que codifica por una proteína de unión en ARN y se ha encontrado en un total de 10 pacientes con ELA de 7 familias no relacionadas en una región en el sureste de la comunidad autónoma de La Rioja. La investigación se ha publicado en la revista ‘Journal of Neurology, Neurosurgery & Psychiatry’.

La investigación se inició después de detectar un número inusualmente alto de casos de ELA en esta zona de La Rioja. El número de casos identificados allí y la incidencia mínima calculada superaba considerablemente el número de casos esperados durante el periodo de estudio, teniendo en cuenta los datos de incidencia habituales, que suelen estar entre dos y tres casos por cada 100.000 habitantes anualmente. "Nos dimos cuenta de que había muchos pacientes de esta zona, de pueblos muy próximos, cosa que llamó mucho la atención", explica el Dr. Ricard Rojas-García, investigador del Grupo de Enfermedades Neuromusculares del Instituto de Investigación Sant Pau y uno de los autores principales del estudio.

Entre el 5% y el 10% de los casos de ELA tienen antecedentes familiares de la enfermedad, y en el 30% de estos casos, no se ha podido identificar una causa genética subyacente después de un estudio exhaustivo de los genes conocidos relacionados hasta el día de hoy con la ELA. El objetivo de los investigadores de Sant Pau ha sido identificar nuevos nada relacionados con la ELA en casos donde las pruebas genéticas resultaron negativas. Los científicos realizaron una secuenciación del genoma completo en un grupo de 12 pacientes con ELA (5 de ellos con antecedentes familiares) de esta área única. El estudio se amplió para incluir miembros de familias afectadas y casos adicionales de una región circundante más amplia.

Demasiados casos para ser una zona tan pequeña

La región sudeste de la comunidad de La Rioja es un área de 1219,42 km². Entre el 2009 y el 2022, tenía una población media de 43.433 personas. La densidad de población era de 35,62 habitantes/km². Teniendo en cuenta una incidencia media de ELA de 1,4-2,47 casos/100 000 personas/año, se calcularon un número esperado de casos de 0,44-0,77 por año en esta área, equivalente a 5-10 pacientes durante el periodo de estudio (2009-2022). En referencia a los casos de ELA de tipo familiar, suponiendo una frecuencia del 5-10%, el número esperado de casos al área sería de 0,02-0,08 caso/año o un caso nuevo cada 12,5-50 años. A pesar de eso, entre el 2009 y en el 2022, en Sant Pau se visitaron 15 pacientes del área de estudio que cumplían los criterios diagnósticos de ELA. 7 de los 15 (46,6%) tenían antecedentes familiares de ELA y se consideraron como posibles casos familiares. Por otra parte, se descartaron mutaciones conocidas causantes de esta enfermedad mediante el análisis de secuenciación del exoma o un panel de genes personalizados. Los investigadores señalan que se trata de una zona con una elevada tasa de emigración, por lo que puede haber casos en el resto del Estado.

Un mejor diagnóstico y terapias personalizadas

"Esta mutación no solo ayudará a diagnosticar la ELA de manera más precisa, sino que también abre la puerta a investigar nuevas terapias personalizadas y a estudiar la función de esta proteína en la enfermedad", añade el Dr. Oriol Dols-Icardo, investigador del grupo de Neurobiologia de les Demències y la Unitat de Memòria a l’IR Sant Pau y primer firmante del estudio. El Dr. Dols-Icardo considera que estos hallazgos podrían abrir nuevas vías para el diagnóstico y el tratamiento de la ELA. La identificación de ARPP21 como en gen causante subraya la importancia de seguir investigando en áreas geográficas específicas para descubrir nuevos factores genéticos. Aunque este descubrimiento se ha hecho en una región específica de España, los investigadores creen que podría tener implicaciones globales. "Eso abre la puerta al hecho de que otros equipos de investigación de nivel mundial revisen sus bases de datos y pacientes para ver si esta mutación también está presente en otros lugares", explican.