El comité de seguridad de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) está estudiando varios medicamentos utilizados para la pérdida de peso y para el tratamiento de la diabetes tipo 2 porque estos podrían propiciar pensamientos suicidas y autolesiones, según ha informado el organismo este lunes. Se trata de tres fármacos, Ozempic (semaglutida), Saxenda (Liraglutida) y Wegovy (semaglutida), ampliamente utilizados, ya que los toman más de 20 millones de pacientes cada año.
Según ha expuesto el EMA este lunes en un comunicado, la investigación se ha iniciado después de que la agencia de medicamentos islandesa informara de pensamientos suicidas y autolesiones en personas que utilizaban estos fármacos. Aun así, admiten que todavía no está claro si en los casos denunciados hay una correlación con los medicamentos, o si se deben a las condiciones subyacentes de los pacientes, o por otros factores. La revisión empezó el 3 de julio y se prevé que haya una resolución definitiva para noviembre.
EMA's #safety committee, the #PRAC, is reviewing data on the risk of suicidal thoughts and thoughts of self-harm with GLP-1 receptor agonists used for weight loss and for treating type 2 #diabetes.
— EU Medicines Agency (@EMA_News) July 11, 2023
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Fármacos para adelgazar
Los medicamentos Saxenda y Wagovy están autorizados para controlar el peso en personas obesas o con sobrepeso, mientras que Ozempic lo está para el tratamiento de adultos con diabetes tipo 2, pero también se ha utilizado fuera de su finalidad inicial para la pérdida de peso. Actualmente, el comportamiento suicida o el riesgo de autolesiones no aparecen como posibles efectos secundarios al etiquetado del producto. Además de estos tres medicamentos, el EMA ha ampliado el campo de investigación en otros fármacos similares, todos los agonistas del receptor GLP-1, es decir, los que se utilizan para tratar la diabetes.
Continuar con el uso
A pesar de la investigación sobre los medicamentos, la Agencia recomienda a los pacientes y profesionales que los utilizan que continúen con su uso de acuerdo con la información del producto indicada actualmente en los respectivos prospectos. El EMA también insta a informar al organismo de los posibles efectos secundarios sospechosos que se puedan advertir durante su uso.