El Ministerio de Igualdad ha anunciado este martes que investigan una denuncia contra la diócesis de Barcelona por terapias de conversión, que también incluye seis diócesis más: València, Madrid, Málaga, Getafe, Alcalá y Sigüenza-Guadalajara. Ha sido durante las últimas semanas cuando la Asociación Española contra las Terapias de Conversión (No es terapia) ha denunciado ante el departamento las siete diócesis por convocar y acoger charlas que promueven terapias de conversión de la homosexualidad —prohibidas por la ley trans—, impartidas por la empresa Media Salud Comunicación S.L. y su administradora única, Marta Sanz Lovaine. En septiembre de 2021, No es terapia ya constató el aumento de denuncias por terapias de conversión a raíz del escándalo de Xavier Novell.
En las siete diócesis se presentaba la iniciativa Transformados, que la empresa define cómo un "apostolado" dirigido a "aquellas personas con tendencia o atracción hacia el mismo sexo que pueden, mediante un camino de conversión o de cambio de vida, devolver a sus orígenes biológicos". Según la denuncia firmada por el abogado y presidente de No es terapia, Saúl Castro, el proyecto "se centra en presentar información falsa y una hoja de ruta dirigida a las personas homosexuales o bisexuales cristianas para que, mediante un encuentro con Cristo y una práctica religiosa continuada, puedan bien formar a una familia heterosexual y dejar atrás su orientación sexual hacia personas de su mismo género; o bien vivir su sexualidad homosexual desde la plena castidad y abstinencia".
Sanciones de hasta 150.000 euros
Después de una reunión entre la ministra de Igualdad, Ana Redondo, y Castro, desde el ministerio han anunciado que analizarán el contenido de la denuncia "para estudiar las acciones a impulsar en el marco de sus competencias". También han recordado que la ley trans prohíbe, por primera vez, las terapias de conversión —concretamente, "la práctica de métodos, programas y terapias de aversión, conversión o contracondicionamiento, en cualquier forma, destinados a modificar la orientación o identidad sexual o la expresión de género de las personas, incluso si cuentan con el consentimiento de la persona interesada o de su representante legal".
La norma establece sanciones que van desde los 200 hasta los 150.000 euros y que comportan la prohibición de recibir ayudas públicas, en función de la gravedad de los hechos. Las infracciones leves contemplan la utilización o emisión de expresiones vejatorias, sancionadas con multas de 200 a 2.000 euros; las graves, la no retirada de expresiones vejatorias en sitios web o redes sociales por parte de los prestadores de servicios, sancionadas con multas de 2.001 a 10.000 euros; y las muy graves, la promoción o práctica de métodos, programas o terapias de aversión, conversión o contracondicionamiento con la finalidad de modificar la orientación sexual, identidad de género o características sexuales, sancionadas con multas de 10.001 a 150.000 euros.
La oposición del Arzobispado de Barcelona
Ante las informaciones, el Arzobispado de Barcelona se ha desmarcado de la organización de terapias de conversión. En un comunicado del pasado 4 de enero, aseguró su "oposición" a estas iniciativas y precisó que están "presuntamente vinculadas a dos empresas privadas que no tienen ningún vínculo con la archidiócesis".
Castro asistió a tres de estas charlas y explicó a Efe que "aseguran que la sanación de las supuestas heridas mortales que genera la homosexualidad te pueden llevar a tener un encuentro con Cristo, que satisfaría todas las expectativas de amor que buscas en personas de tu mismo sexo y te ayudaría a sanar hasta concederte la vocación de la familia, que te permitiría desarrollar una sexualidad heterosexual". Según el abogado, este mensaje lo lanzan testimonios de presuntos exhomosexuales ("transformados"), que relatan cómo "modificaron la forma de vivir su homosexualidad y abrazaron la castidad".
¿Cómo son las terapias de conversión?
"El rector titular de la iglesia presenta el apostolado, después Marta Sanz habla de los peligros de la ideología de género, que socialmente dice que la única vía para tratar la homosexualidad es la afirmación, después hablan los transformados, y para acabar se abre un turno de preguntas para los asistentes", detalla el presidente de No es terapia. En cualquier caso, Castro subraya que las ideas lanzadas por Media Salud Comunicación en estas charlas "presentan una visión humillante, discriminatoria, estigmatizando, altamente negativa y monolítica de la homosexualidad", a la cual se asocia la imposibilidad de vivir de forma sana y feliz, la contracción de enfermedades, el desarrollo de problemas de personalidad, la promiscuidad, el trabajo sexual, el consumo de drogas y la violencia sexual.
El abogado remarca que "las diócesis son responsables de velar para que en los acontecimientos que se llevan a cabo en sus parroquias no se cometan infracciones administrativas", a la vez que insiste en la idea de que el proyecto Transformados promueve las terapias de conversión y se ofrece en remitir a las personas interesadas a personas u organizaciones que las ejecutan. La ley "prohíbe tanto la promoción como la práctica" de las terapias de conversión, de manera que es "irrelevante" si la empresa y las diócesis denunciadas solo las promueven o también las ejecutan.