El juzgado de instrucción número 5 de Martorell, que había abierto una causa para investigar la muerte del fundador de Mango, Isak Andic, ha aceptado el relato de los Mossos d'Esquadra, que avanzó ElNacional.cat, y ha ordenado el sobreseimiento provisional de las diligencias. La jueza que asumió el caso, la que estaba de guardia aquel fin de semana, ha tomado esta decisión después de que los Mossos d'Esquadra hayan concluido que fue una muerte accidental. La magistrada abrió la causa siguiendo el protocolo habitual en una muerte no natural, aunque el primer informe policial ya indicaba de forma preliminar que esta muerte habría sido fruto de un accidente, como informó este diario.
El hombre se precipitó por un desnivel cerca de uno de los aparcamientos de la zona de Collbató, al regresar de una ruta por Montserrat. Su hijo llamó al 112, alertando de la emergencia, asegurando que su padre había caído y que, según lo que él podía ver, estaba inconsciente. Nada pudo evitar el trágico final. Al día siguiente, agentes de los Mossos d'Esquadra de la comisaría de Martorell, de la Unidad de Investigación, y también de la Unidad de Intervención de Montaña (UIM), los especialistas de los Mossos en la investigación de accidentes de montaña. La jueza también ha recibido el informe forense de la autopsia del hombre y ha leído las declaraciones que los familiares del hombre hicieron a los agentes que investigaron el caso.
Accidente mortal en Montserrat
Isak Andic murió el 13 de diciembre después de caer desde una altura de unos 150 metros cuando hacía una excursión con su hijo, cerca de las cuevas de Collbató, en el Baix Llobregat. El fundador de Mango tenía 71 años y su muerte causó un gran impacto social, con mensajes de condolencia del presidente de la Generalitat de Catalunya, Salvador Illa, y de otros responsables políticos, económicos y sociales, así como empresariales, con la necesidad de reestructurar la empresa textil, líder mundial.