Empieza el juicio al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales por el beso no consentido a la futbolista Jennifer Hermoso en la final del mundial de fútbol femenino que ganó la selección española en verano de 2023. Está acusado de un presunto delito de agresión sexual y la Fiscalía pide dos años y medio de prisión para él. Este lunes 3 de febrero, primera jornada del juicio, testificará la presunta víctima, la futbolista Jenni Hermoso. Después de ella lo harán la directora del Fútbol Femenino de la RFEF, Ana Álvarez Mesas, y la jefa de prensa de la selección española femenina, Patrícia Pérez Requena.
A lo largo de la semana comparecerán ante el tribunal una veintena de testimonios más, entre los cuales: las futbolistas Alèxia Putellas, Irene Paredes y Laia Codina; la seleccionadora femenina, Montse Tomé; el seleccionador masculino, Luis de la Fuente; el hermano de Jenni Hermoso, Rafael Hermoso; o las hijas de Luis Rubiales, Lucía y Ana. Los acusados comparecerán el último día, el miércoles 12 de febrero: se trata de Luis Rubiales, del entonces director de marketing de la RFEF, Rubén Rivera; del entonces seleccionador femenino, Jorge Vilda; y del exdirector deportivo de la selección masculina, Albert Luque. Estos últimos tres están acusados de coacciones a la jugadora para evitar que el caso fuera a más.
- La fiscalía pide 2 años y 6 meses de prisión para Rubiales por el beso en Jenni Hermoso y las coacciones
- El juez envía a Luis Rubiales al banquillo de los acusados por el beso en Jenni Hermoso
- Jenni Hermoso ratifica delante al juez que el beso de Rubiales no era consentido y que recibió presiones
- Luis Rubiales dimite como presidente de la RFEF veinte días después del beso a Jennifer Hermoso
Hasta aquí el seguimiento en directo del juicio a Luis Rubiales por el beso no consentido y las presuntas coacciones a Jennifer Hermoso.
La estrategia de defensa de Rubiales siempre ha sido defender que el beso que le dio a Jenni Hermoso fue consentido y fruto de la euforia "de máxima alegría y satisfacción" por ser campeonas del mundo. “Esto no es que alguien ha llevado a una oficina, a alguien a escondidas, a darle un beso por la fuerza. Es que fue algo tan natural, a la luz de millones de ojos, entre dos personas que han estado conviviendo mucho tiempo", afirmó en su declaración ante el juez, donde remarcó que "no hay nada autorizado ni desautorizado, son comportamientos dentro de una celebración extraordinaria".
La Fiscalía pide para Rubiales dos años y medio de prisión por la agresión sexual y las coacciones a Hermoso. Está previsto que los 4 acusados —Luis Rubiales, Jorge Vilda, Albert Luque y Rubén Rivera— declaren a partir del miércoles 12 de febrero.
El próximo lunes, 10 de febrero, será el turno de las dos hijas de Rubiales, que declararan como testimonios a propuesta del expresidente de la RFEF. Además, ese día también prestarán declaración el consejero de Deportes balear, Salvador Losa, y la seleccionadora de futbol femenino, Montse Tomé.
El juicio se alargará durante al menos 11 días, y contará con las declaraciones como testimonios este jueves, 6 de febrero, de las compañeras de Jenni Hermoso en la selección: Alexia Putellas, Irene Paredes, Laia Codina, así como su amiga, Ana Belén Ecube, y el que fuera responsable de 'compliance' de la RFEF, Francisco Javier Puyol.
La futbolista Jennifer Hermoso ha negado este lunes ante el juez que diera permiso a Luis Rubiales para besarle en la boca y que este le "faltó al respeto". "Sentí que estaba fuera de contexto totalmente. Sabía que me estaba besando mi jefe y eso no debe de ocurrir en ningún ámbito laboral o social". Hermoso ha asegurado que Rubiales manchó "uno de los días más felices" de su vida.
Este martes se reanudará el juicio a las 10:00 horas en la Audiencia Nacional con las declaraciones del exvicesecretario general de la RFEF y exresponsable de Integridad, Miguel García Caba, el exdirector de comunicación de la RFEF, Pablo García Cuervo; Enrique Yunta Negra, miembro del equipo de comunicación de la RFEF; el seleccionador de la selección masculina de fútbol, Luis de la Fuente y el coordinador del Departamento de Psicología de la RFEF desde el 2022, Javier López Foso.
🔴 Acaba la primera sessió del judici contra Luis Rubiales, que es reprèn aquest dimarts a les 10:00 hores.
Acaba la declaración de Patricia Pérez.
Pérez cuenta que se enteró del beso porque "una de las veces que voy al vestuario estaban comentándolo dos de ellas haciendo un directo en sus redes sociales". Además, ha reconocido que sabía que hay un protocolo para agresión sexual, pero no la figura de una salvaguarda.
Patricia Pérez dice que cuando entró en la sala para reunirse con Rubiales, había ocho personas en la sala. Y que lo que iba a ser una reunión con el departamento de integridad no lo fue, pero Rubiales le dijo que estuviera tranquila, "que estaban en familia y le tenía que ayudar". Además, cuenta que Rubiales le pide que cuente, que es Jenni quien le levanta y le da unos golpes en la espalda, a lo que ella dice que no podía afirmarlo desde su posición. "Desde el primer momento tuve claro que era una encerrona".
Patricia Pérez relata que tras la llamada envió un mensaje a Pablo García Cuervo diciéndole que se iba a ir de vacaciones y que este le dijo que sí. "Al día siguiente recibo una llamada para decirme que tengo que ir urgentemente a la Federación y declarar en el departamento de integridad. No entiendo por qué. Sabían que yo no había participado en la elaboración del comunicado. Termino esa llamada llorando y voy a la Federación. Pérez afirma que le pasaron las preguntas, que solo las tenía que firmar, pero que eran cosas que ella no había visto.
Patricia Pérez explica que Jenni bajó del autobús "como harta", y que tras leer el texto dijo: "haced lo que queráis". "Lo dijo con hartazgo, estaba cansada y saturada de la situación", añade.
Turno ahora para la jefa de prensa de la selección española femenina, Patricia Pérez Requena, que relata que antes de llegar al aeropuerto recibe una llamada del director de comunicación, Pablo García Cuervo, que es necesario hablar con Jenni para emitir un comunicado. "Pablo había escrito un par de párrafos en su móvil, lo lee y luego le enseña el texto a Jennifer Hermoso".
Así ha sido la salida de la jugadora Jennifer Hermoso de la sede de la Audiencia Nacional después de declarar ante el juez.
Acaba la declaración de la primera testimonio.
Álvarez explica que habló con el hermano de Jennifer Hermoso, que le dijo que le quería explicar la conversación que había tenido con Jorge Vilda "pero finalmente nunca se produjo. La vorágine del trabajo me impidió habló con Rafael Hermoso".
Ana Álvarez explica que en la Federación hay una persona que se encarga de la protección por acoso, que es el psicólogo, actúa como figura de "salvaguarda" e insiste en que no participó en ninguna de la toma de decisiones.
Ana Álvarez cuenta que le llaman desde la RFEF y le piden que no se vaya de viaje ni muy lejos, que seguramente habrá que trabajar en la federación. "Me pongo en contacto con Patricia Pérez. Simplemente, actué como transmisora, teníamos que estar pendientes por si nos llamaban de la federación para trabajar en el informe".
Álvarez cuenta que le piden que hay que hablar con Jenni para emitir un comunicado, y posteriormente, el jefe de comunicación le envía el comunicado que han escrito en nombre de la jugadora. "No tengo una orden clara, y como el equipo de comunicación está con ello, se queda ahí y no tengo más información del comunicado".
"Estaba preocupada e incómoda. La decisión la tenía tomada y así me lo hizo saber". Álvarez explica que le dijo que "no me extrañaba que le pidieran hacer el vídeo, pero que ella era libre de tomar sus decisiones".
Álvarez cuenta que Jennifer Hermoso habló con ella en el avión: "La noté agitada, nerviosa. Había hablado con el presidente y le pidió que hiciera un vídeo para quitar hierro al beso. Me dijo que no quería hacer el vídeo, yo le dije que se tranquilizara, que era campeona del mundo y que si había decidido no hacer el vídeo, que así fuera".
Turno ahora para la directora del Futbol Femení de la RFEF, Ana Álvarez Mesas, que relata como fue la ceremonia de la entrega de medallas, y como después Rubiales le pidió que dijera a Jenni que saliera del vestuario para hablar con ella.
Después del remanso, tendrán que declarar a la directora del Fútbol Femenino de la RFEF, Ana Álvarez; la jefa de prensa de selección femenina, Patricia Pérez y Susana Rodríguez, propuesta por Rubén Rivera, que lo hará de forma telemática.
✍ Jenni Hermoso, al juicio a Luis Rubiales: "Me estaba dando un beso mi jefe y eso no tiene que pasar". Jenni Hermoso ratifica en la Audiencia Nacional que en ningún momento consistió el beso en la boca que le hizo Luis Rubiales durante la celebración del Mundial que ganó la selección española femenina en agosto del 2023 en Sidney. "No pude reaccionar en ningún momento, fueron milésimas de segundo", ha afirmado a preguntas de la fiscal Marta Durántez. Estaba fuera de contexto totalmente, me estaba dando un beso mi jefe y eso no tiene que pasar en ningún ámbito laboral. [...] supe y sentí que eso no había sido normal", ha añadido.
🔴 Acaba la declaración de Jennifer Hermoso y se establece un receso en el juicio.
Hermoso reconoce que Rubén Rivera no le manifestó en Ibiza que tuviera que hacer un vídeo o un comunicado para defender a Luis Rubiales.
Hermoso vuelve a relatar la insistencia de Rubén Rivera para hablar con Albert Luque. "Fue muy pesado. Él no tenía por qué estar ahí insistiendo. Su labor en Ibiza era otra".
La futbolista detalla que conoce a Rubén Rivera de su etapa en la selección. Sobre sus funciones en Ibiza, explica que se encargaba de la organización y de las peticiones personales de las jugadoras en la isla.
A preguntas de la defensa de Albert Luque, Hermoso relata que siempre había tenido buena relación con él. "Teníamos intercambios de mensajes. Cuando me fui a Ibiza me conseguía entradas para ir a ciertas discotecas... básicamente nuestra relación empezó con intercambios en viajes a Ibiza".
Hermoso habla sobre su relación con el que era su entrenador: "Mi relación con Jorge Vilda era muy buena, por una parte, entendí que es trabajador de la Federación y súbdito de Luis Rubiales, pero eche mucho en falta que él no me preguntara. Me dolió bastante y me sigue doliendo. Pienso que siempre he dado todo con él cuando era mi entrenador y él no supo dármelo".
Hermoso defiende que su actitud no quiere decir como está por dentro. En relación con el paralelismo con el beso de Sara Carbonero e Iker Casillas, repite: "Yo ahí me enseñan un meme, un meme es para reírte y aquí sí que no tengo que estar llorando ni sentada en el último asiento. Mi actitud de cómo esté no quita cómo me siento". Sobre si vio a Rubiales emocionado, apunta que "todo el mundo estaba emocionado".
Hermoso reconoce que le dijo a su hermano que le quitaran hierro porque si no se centraría el foco en el beso y no en ser campeonas del mundo. "Yo hablé con mi hermano. Ahí sí que le pedí que cuando le preguntaran no dijera nada. Que quitara todo el hierro al asunto, porque si decíamos cualquier cosa, al final se iba a centrar el foco en eso y no en lo que habían conseguido".
Hermoso insiste en que no pudo apartarse del beso que le profirió Rubiales y no reaccionó de mala manera porque afirma: "Estoy en un acto protocolario, saludé a todo el mundo, y yo seguí el protocolo que era ser jugadora de la selección y no quiere decir que no sintiera ese asco o rechazo".
Hermoso detalla que su relación con Rubiales era de confianza. "Muchas veces me saltaba a mi entrenador y hablaba con Rubiales sobre campos y demás, siempre hubo una buena relación".
Hermoso asegura que nadie le habló del protocolo de acoso. "Lo supe después. Nunca supe si en la Federación estaba marcado un protocolo de acoso porque nunca nos dieron una reunión ni nada hablándonos de todo esto".
Hermoso explica algunos de los momentos por los que ha sido más criticada, como un montaje donde aparecen como si fueran Sara Carbonero e Iker Casillas. "Era un meme y por eso me reí, aunque yo estuviera contenta y celebrando, no quiere decir que por dentro no lo estuviera pasando mal".
A preguntas de su defensa, sobre que se le pasó por la cabeza al ganar el mundial, dice: "Disfrutarlo en todo momento. En mi mente solo estaba poder disfrutar ese momento. Posiblemente, no voy a volver a repetir". Inmediatamente después de celebrarlo, cuando sube al atril, sobre qué espera, responde: "Lo que tengo en la cabeza es que te cuelgan en la medalla, bajas al atril donde lo celebras con tus compañeras y no entra nada más".
Jenni Hermoso relata las consecuencias profesionales que le supuso no apoyar a Rubiales. "Lo siguiente fue la no convocatoria después del Mundial". La jugadora explica el papel de Montse Tomé, que la tacha de "mano derecha de Vilda".
La jugadora explica los mensajes que Albert Luque le había enviado a su amiga Ana Ecube: "Me deseaba lo peor en la vida por no haber querido ayudar a solucionar el mayor marrón de Rubiales y por todo lo que había hecho Rubiales tendría que haberle ayudado. Que era una persona de gran bajeza humana".
Hermoso explica que justo en el momento que le pidió a Rubén Rivera que la dejara en paz, apareció Albert Luque, que le pidió hablar con él "y me preguntó: ¿no me vas a dar 2 minutos? La jugadora explica que "me venían a hablar del mismo tema, y si venía a un hotel donde no tenía que estar y venía a hablar conmigo para ese tema y decidí que no iba a hablar con él".
"La única persona a la que puedo escribir estando en Ibiza es Rubén, me acaba dejando en paz porque se lo pido". Hermoso explica que con Albert Luque también se llevaba bien, y tenía muy buena relación con él. "No sé qué pintaba en Ibiza, si estaba en el hotel donde estábamos nosotras era con alguna intención".
Hermoso cuenta que le pide a su agente que llamen a alguien de la RFEF que pararan "estaban cogiendo a mis amigas y a mi familia para hacer algo que yo no quería hacer. No recuerdo a mi amiga—Ana Ecube—, más de 30 minutos tumbada conmigo en la hamaca, estaba Rubén haciéndole gestos para hablar con ella".
Hermoso también explica que Rubén Rivera le cuenta que estaba Albert Luque en el hotel, "que quería hablar conmigo. Le escribí un mensaje, que lo sentía, que le contestaba por la confianza, pero no iba a hablar nada más de eso".
En relación con el viaje a Ibiza de algunas jugadoras de la selección, relata: "Yo llego a Ibiza, nos fuimos al hotel, lo primero que hicimos fue comer y mientras estamos comiendo se acerca Rubén Rivera y me da un teléfono, era el director de integridad que me dice que tenemos que hacer una videollamada y que solo faltaba yo por hablar. Le pregunté que si estaba obligada a hacerlo y me dijo que no, pero que había que hacerlo porque es un protocolo interno de la Federación. Le dije que me dejara hablar con mis abogados. No quería hacerlo porque no sabía qué estaba haciendo tampoco".
Hermoso agradece jugar en México, ya que en España la situación era muy difícil de gestionar. La futbolista explica que en ningún momento habló con el psicólogo de la selección, "ni él vino a preguntarme nada, me rodee de las personas con las que me sentía segura".
Hermoso explica que en un momento "sentí miedo por si alguien me estaba persiguiendo", y que recibió amenazas de muerte. Una situación que la obligó a irse de Madrid "porque era insostenible seguir aquí con cámaras y coches detrás de mí todo el día. Mi vida cambió desde ese momento, hay cosas que agradezco porque me las he ganado a pulso".
La futbolista explica que en el avión habla con la capitana del equipo, Ivana Andrés, y le cuenta que también le han pedido hacer un vídeo como capitana para quitarle hierro al asunto. "Yo le dije, no hagas nada, porque te van a querer meter a ti".
Jenni Hermoso relata que "nadie se acercó a preguntarme como estaba, ni siquiera Jorge Vilda, qué tantos años llevábamos juntos. Me sentí desprotegidísima por parte de la RFEF, tenía que ser mi lugar seguro, y nadie me preguntó si podía hacer una cosa u otra".
En relación con la primera entrevista que la futbolista da en la Cadena Cope: "Seguía en la misma situación, en modo campeona del mundo. Nadie me iba a quitar la alegría de celebrar que era campeona del mundo y quise quitarle hierro. Con cualquier cosa que yo dijera creía que iba a quitarle mérito a lo que habíamos hecho. Pensé que habían sido muchos años de trabajo y no habían sido fáciles, habíamos luchado mucho".
Hermoso afirma que era consciente que decir que iba a ayudar a Rubiales iba a tener consecuencias y recuerda que después de negarse, no fue convocada en el siguiente partido de la selección. Después de decir que no al vídeo en Doha, "lo siguiente que me dice es voy a hablar con tu familia. Ahora mando a Chema que hable con tu hermano, y yo le dije que no, que iba a hablar con mi agencia y veremos que pase. Él me dijo piénsatelo y veremos lo que pasa". La jugadora recuerda que al acabar la conversación, se lo cuenta alguna de sus compañeras que le dijeron "que ni de coña hiciera eso, yo ya me pongo a llorar, y después me voy a dormir un rato". Hermoso explica que después de dormir, una compañera le cuenta que Jorge Vilda intentó hablar con su hermano en diversas ocasiones.
Jenni Hermoso explica que en el avión, "ya empecé a notar mucho movimiento, todo el rato estaban reunidos en el asiento de Jorge Vilda y Luis Rubiales y todo el mundo empezó a ver que pasaba algo". La futbolista explica como Rubiales le pidió que le ayudara y grabara un vídeo con él porque ya le estaban acusando de agresión sexual, "y yo le dije que no, que no había propiciado ese momento, y yo le dije que no, que si quisiera que lo hiciera él, que lo sentía, pero no iba a hacerlo". Rubiales le pidió que lo hiciera por sus hijas, y también que tenía una pareja, que no le había molestado. Hermoso destaca que le molestó mucho que Rubiales le dijera "a ti y a mí nos gusta lo mismo, como quitándole hierro al asunto".
La futbolista afirma que en el vestuario ya le dijo a Rubiales que no le había gustado. Afirma que en el trayecto del autobús se siguió comentando con sus compañeras de forma jocosa el beso, hasta que Irene Paredes dijo "chicas, vale ya las bromas, que esto es más grave, y a partir de ahí, todas bajamos un poco el tono".
Hermoso explica que bajó del autobús "un poco atosigada, ya les digo que no voy a hablar y en un momento de hartazgo les dije haced lo que queráis. Ya estaban haciéndome sentir partícipe de algo que no había hecho".
Hermoso explica como fue el camino en autocar hacia el aeropuerto, "me llaman para que baje corriendo del autobús", aunque no sabe especificar quién fue. "Solo bajé yo, y abajo me estaban esperando Patricia Pérez y Pablo García Cuervo —responsables de prensa—, me enseñan un móvil con un comunicado para que le lea y enviarlo a las noticias". Hermoso afirma que no escribió ni una palabra de ese texto porque no se había reunido con nadie "yo bajo y ese comunicado ya estaba escrito".
"Rubiales me dijo que eso había que pararlo de alguna manera". Preguntada por su actitud durante la celebración con sus compañeras, detalla: "Estoy con mis compañeras comiendo, bebiendo alcohol, y estoy alegre, porque es el mayor logro que he podido conseguir en mi vida, y era importante poder celebrar ese momento. No había cabida para que yo estuviera llorando porque no procedía, ni por mí, ni por mis compañeras".
Jennifer Hermoso detalla que solo bajar del podio explicó la situación a Alèxia Putellas y a Irene Paredes. Una vez en el vestuario, Hermoso explica que, la exdirectora de marketing, Ana Álvarez, le pide que salga del vestuario "que el presi quiere hablar conmigo". La conversación se produjo en uno de los pasillos del estadio, él le explicó que "se estaba enredando en las redes sociales. Yo le dije, te va a caer, porque no está bien. Él me dijo que fue con efusividad, y yo le dije, de acuerdo, pero ya sabes lo que has hecho".
Hermoso afirma que Rubiales le cogió la cabeza "con una efusividad" que ella no pudo separarse. Según relata, sintió que estaba fuera de contexto, "sabía que me estaba besando mi jefe y esto no debería ocurrir en ningún contexto laboral ni social". "Me sentí poco respetada, fue un momento que manchó uno de los días más felices de mi vida, y es importante decir, que en ningún momento busqué ese acto y no lo esperé, porque se me faltó el respeto".
Hermoso asegura que si Rubiales le hubiera preguntado si "quería un piquito" no lo hubiera consentido. "No escuché nada del beso ni de gestualizar con su boca ningún tipo de pregunta". "Solo me doy besos en los labios cuando yo decido hacerlo", defiende.
En preguntas a su defensa, Jennifer Hermoso explica como sucedieron los hechos el día de la final de Sídney. "Saludé a la reina, a su hija, y luego me abrace a Rubiales, le dije "la que hemos liado". Ya después él dio un brinco, y me encontré sus manos en mis orejas y me dio el beso". La futbolista explica que si hubo peligro de haberse caído en el momento que Rubiales se colgó de ella "dada la descompensación de peso, cuando Rubiales se sube". Preguntada sobre el consentimiento del beso, "yo no escuché, ni entendí nada, cuando me puso las manos en las orejas, ya fue el momento de darme un beso en la boca".
Jennifer Hermoso afirma que tenía claro "desde el primer día" que iba a denunciar la situación, antes de la llamada de la Fiscalía.
🔴 Empieza la declaración de Jennifer Hermoso como testigo en la Audiencia Nacional.
La defensa de Rubiales pide que se tenga en cuenta las imágenes que se pudieron conseguir en el túnel de vestuarios del estadio de Sídney, donde se produjo el beso no consentido. Olga Tubau reitera la petición de esta prueba documental al asegurar que hay dos versiones de lo que sucedió en este lugar. El juez ha rechazado su petición, porque según ha puesto de manifiesto, "poco puede aportar una fotografía a las conversaciones que hubo o pudo haber".
La defensa de Jennifer Hermoso pide al juez revisar la entrevista que Luis Rubiales dio a la cadena COPE el día de la final del Mundial donde se produjo el pico no consentido. "No manifestaba ningún tipo de consentimiento, el señor Rubiales se limitó a insultar a los periodistas y los críticos con el beso. En ese mismo acto no mostró ningún tipo de arrepentimiento ni hizo mención al consentimiento".
🔴Arranca el juicio contra Luis Rubiales, con la lectura de las cuestiones previas.
El exdirector deportivo de la selección española masculina, Albert Luque, también ha llegado este lunes A la sede de la Audiencia Nacional acompañado de Jorge Vilda.

Jennifer Hermoso será la primera en declarar este lunes y explicar su versión sobre lo que pasó a la final del Mundial de fútbol en agosto del 2023.
Así ha sido la llegada de Jennifer Hermoso a la Audiencia Nacional.
Luis Rubiales y Jennifer Hermoso no han hecho ninguna declaración ante los medios a su llegada a la Audiencia Nacional, para declarar al juicio que arranca este lunes y se prevé que se alargará 13 días. Cuando ha llegado Hermoso, en el vestíbulo de entrada estaba Rubiales con su abogada, la futbolista ha pasado de largo y ha ido a una sala hasta que le toque declarar.
Por su parte, Luis Rubiales afirmó al juez a finales del 2023 que pidió consentimiento antes: "Estaba abrazando a las jugadoras, al míster, cuando pasa ella viene hacia mí a darme un abrazo. Nos abrazamos, ella me levanta y hago un gesto para no caerse, todo eso con una conversación en la cual yo le recuerdo—porque había fallado un penalti—que se animara un poco, que sin ella no podríamos haber ganado el Mundial. Ella me dice que soy un crack, que muchas gracias. Y entonces le pregunto, le pregunto. Y ella me dice que de acuerdo". Rubiales también justificó el episodio por "la euforia y la alegría" como cuándo "te toca la lotería o se acaba una guerra".
Luis Rubiales se enfrenta a una petición por parte de Fiscalía de 2 años y 6 meses de prisión por el beso no consentido y las presuntas coacciones posteriores a la jugadora de la Selección femenina Jennifer Hermoso. El juicio se espera que arranque con la declaración de la propia Hermoso, a la exdirectora de fútbol femenino en el momento de los hechos, Ana Álvarez, y la entonces jefa de prensa de la Selección femenina, Patricia Pérez.
Llega a la Audiencia Nacional el exseleccionador de la selección femenina, Jorge Vilda, acusado de haber coaccionado a Jenni Hermoso al considerar que es una persona de confianza de Rubiales. En declaraciones a los medios ha afirmado que "vengo a defender mi inocencia". Preguntado sobre las presuntas coacciones ha defendido que "eso lo decidirá el juez".

Jenni Hermoso ya afianzó su acusación ante la Audiencia Nacional el año pasado, en una vista en la que afirmó que el beso no fue consentido y que se sintió coaccionada por parte de todos los investigados. Además, reiteró que después del beso sufrió una presión constante, tanto en el vuelo de vuelta hacia España, como durante el viaje que hicieron las jugadoras en Ibiza. Una situación, que según detalló, ha afectado a su vida normal, y produciéndole una situación de desasosiego y tristeza.
Los acusados comparecerán el último día del juicio, el miércoles 12 de febrero: además de Luis Rubiales, se trata del entonces director de marketing de la RFEF, Rubén Rivera; del entonces seleccionador femenino, Jorge Vilda; y del exdirector deportivo de la selección masculina, Albert Luque. Estos últimos tres están acusados de coacciones a la jugadora y su familia para evitar que el caso fuera a más. La Fiscalía les pide un año y medio de prisión.
🔴 Llega también a la Audiencia Nacional, Jennifer Hermoso, que declarará este lunes junto con otros 3 testimonios.

🔴Llega a la Audiencia Nacional, el expresidente de la RFEF, Luis Rubiales, acompañado de su abogada, Olga Tubau.

A lo largo de la semana comparecerán ante el tribunal una veintena de testimonios más, entre los cuales: las futbolistas Alèxia Putellas, Irene Paredes y Laia Codina; la seleccionadora femenina, Montse Tomé; el seleccionador masculino, Luis de la Fuente; el hermano de Jenni Hermoso, Rafael Hermoso; o las hijas de Luis Rubiales, Lucía y Ana —en este caso, a petición del acusado.
Después de Jenni Hermoso, comparecerán como testimonios ante el tribunal la directora del Fútbol Femenino de la RFEF, Ana Álvarez Mesas, y la jefa de prensa de la selección española femenina, Patrícia Pérez Requena.
Este lunes 3 de febrero, primera jornada del juicio, testificará la presunta víctima, la futbolista Jenni Hermoso. Comparecerá ante el tribunal hacia las 10:00 h.
Luis Rubiales está acusado de un presunto delito de agresión sexual por el beso no consentido a Jenni Hermoso y la Fiscalía pide dos años y medio de prisión para él.
Buenos días y bievenidos al seguimiento en directo de ElNacional.cat del juicio al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales por el beso no consentido a la futbolista Jennifer Hermoso en la final del mundial de fútbol femenino que ganó la selección española en verano de 2023.