Noche movida este sábado en Barcelona. Después de la manifestación de este mediodía de la ANC ante el Parlament, la presión independentista se ha trasladado a la Meridiana, el punto donde desde hace casi 700 días grupos de vecinos soberanistas cortan la circulación cada noche. Hoy, sin embargo, era el primer día que Interior había prohibido cortar esta arteria de entrada en la ciudad y había ordenado que la manifestación se tenía que retirar de la calle, para evitar cortarla, y trasladarse a la plaza de Fabra y Puig, delante de la estación que lleva el mismo nombre, y así evitar afectaciones de tráfico. Esta prohibición de Interior llega después de meses de cortes y de presión por parte de los partidos españolistas, que habían convertido los cortes independentistas de la Meridiana en su particular guerra. Este sábado la prohibición entraba en vigor y como era de esperar, todavía más gente que los últimos días se han concentrado para cortar la Meridiana y desafiar Interior y los Mossos d'Esquadra, que han desplegado un importante dispositivo policial para evitar incidentes y hacer cumplir la resolución de la Dirección General de Administración de Seguridad.
Centenares de personas, convocadas por Meridiana Resisteix y lo Assemblea Nacional Catalana (ANC) se han concentrado desde las ocho de la noche al punto exacta donde hace meses que los manifestantes de estos barrios de la capital de Catalunya protestan de manera asamblearia en contra de la represión del Gobierno y también contra las "renuncias" del Gobierno de Catalunya. Un relevante dispositivo de los Mossos d'Esquadra, con equipos de orden públicos del ARRO y de la Brimo, han intentado evitar el corte pero cuando faltaban pocos minutos para las ocho de la tarde un grupo de un millar de personas ha empezado a andar en dirección al centro de la vía y aunque los Mossos lo han querido parar, no han podido.
Cuando los manifestantes ya habían ocupado media calzada, agentes de orden público de la policía catalana han intentado mover a los manifestantes otra vez hasta la acera, pero no lo han conseguido. Se han visto porrazos hasta que los mandos han ordenado retirar a los policías y dejar que los manifestantes ocuparan totalmente la vía. La Guardia Urbana ha cortado la circulación y se ha consumado, finalmente, el acto que Interior había querido evitar. La avenida de la Meridiana ha seguido corte durante más de una hora.
Últimos cortes independentistas en Meridiana
Varios grupos vecinales y grupúsculos próximos a Vox, Ciudadanos y el Partido Popular habían abierto una guerra, contra el Ayuntamiento de Barcelona y la Generalitat, para conseguir la prohibición de estas manifestaciones que cada día, en torno a las siete de la noche, cortaba la circulación de la entrada de la ciudad. La Guardia Urbana de Barcelona había redactado varios informes sobre las molestias que provocaba este corte diario y había pedido en Interior que lo prohibieran, pero no ha sido hasta esta semana que la Dirección General de Administración de Seguridad no ha dictado una resolución, que comunicó el jueves al Assemblea Nacional Catalana, que es quien comunica los cortes, que se había finalmente prohibido el corte y que la concentración se tenía que mover fuera de la carretera.
Una de las excusas de Interior era evitar enfrentamientos entre grupos de ideologías antagónicas que algunas veces se encontraban. Sin embargo, durante los más de 650 días de cortes no se han tenido que lamentar graves incidentes. Durante las campañas electorales que se han celebrado durante este tiempo también se prohibieron los cortes, por orden de la Junta Electoral Central.
Muestras de apoyo
Más allá de los centenares de personas que hoy se han concentrado en Meridiana, varios grupos independentistas han mostrado su apoyo a los vecinos independentistas que durante meses han cortado la Meridiana. Entre otros, la presidenta del Parlamento, Laura Borràs -que también se ha dejado ver al acto de hoy-, o el mismo Consell per la República que preside el presidente Puigdemont.
"Ante la represión continuada contra el independentismo por parte del estado español, no podemos hacer otra cosa que protestar desde las calles y las instituciones porque no hay nada peor que normalizar la represión", asegura el Consell per la República, censurando la decisión de Interior de prohibir las concentraciones a Meridiana.