El sindicato CGT Catalunya ha anunciado este lunes el inicio de una huelga indefinida, a partir del 21 de agosto, de los trabajadores de los centros de emergencias 112 de Catalunya, en Reus y la Zona Franca (Barcelona). Sus reivindicaciones son la creación de un convenio propio y la internalización del servicio, el cual actualmente está adjudicado en el Grupo Norte.
El origen de este conflicto laboral lo encontramos cuando Grupo Norte se declaró en concurso de acreedores voluntario y el Govern de la Generalitat empezó un proceso de concurso de urgencia que acabó con la adjudicación a Ferrovial, según recuerda la ACN. A pesar de acabar encontrando otra empresa que se hiciera cargo del servicio, el concurso de acreedores de la antigua compañía puso en peligro el cobro de las nóminas y es aquí donde se inició el conflicto.
Una huelga fallida
La del próximo sábado 21 de agosto no será la primera protesta de la plantilla por este conflicto. El pasado Sant Joan los trabajadores convocaron una huelga que en la práctica no se produjo, ya que la Generalitat decretó servicios mínimos del 100%.
A pesar de los impedimentos las plantillas de los dos centros pudieron concentrarse para protestar por la situación. Los trabajadores de las instalaciones de Zona Franca lo hicieron por la mañana y los de Reus por la tarde.
En aquella ocasión remarcaron que el personal que tienen es insuficiente, un hecho que creían más que probado por el decreto de la Generalitat de 100% de servicios mínimos. También denunciaron sus condiciones: "Tenemos un contrato de telemarketing, que es el más bajo que hay y que no tiene nada que ver con lo que hacemos", declaró a ACN Imma Martos, trabajadora del 112 en Reus. Los empleados de este servicio de emergencia consideraron que la precariedad que sufren hace que el servicio no sea óptimo y que eso, en definitiva, acaba perjudicando la ciudadanía.
Además, se le sumaba la gestión que se hizo cuando Grupo Norte entró en concurso de acreedores. "Pasan las empresas, pasan los gobiernos, pero no hemos visto ninguna repercusión", lamentó Marcos, quién aseguró que en la situación de traspaso entre compañías ha sido "la gota que ha hecho tirar el vaso"
Apoyo de la CUP
En la jornada de protesta del pasado Sant Jan participó la diputada de la CUP Laia Estrada, quien calificó "vergonzoso" que los trabajadores no pudieran hacer huelga por los servicios mínimos del 100%. La CGT, quien ya convocó la protesta del 23 de junio, impugnó la decisión de los servicios mínimos impuestos por la Generalitat.
Estrada también comentó que los empleados no pueden atender "todas las llamadas con la calidad que se merecen" y que la precariedad hace que "pierdan profesionales".