Ángeles Béjar, madre de Luis Rubiales, cesado temporalmente como presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), y su cuñada, mantienen por segundo día el encierro y la huelga de hambre en una iglesia de Motril (Granada) para pedir justicia tras la polémica por el beso en la boca a la futbolista Jenni Hermoso. Según han indicado a EFE, ambas se encuentran en buen estado, han pasado la noche bien "dentro de lo que cabe" y tienen la intención de mantener el encierro de forma indefinida. 

Una noche en la que se han mantenido los apoyos de algunos vecinos de la localidad granadina, que se han acercado hasta la puerta de la parroquia de la Divina Pastora de Motril, donde ambas mujeres mantienen el encierro. Las dos se quedaron en el interior de la parroquia aprovechando que se estaban haciendo las labores de limpieza y tras decirle al párroco de la iglesia que iban a rezar por su hijo.

En declaraciones a El programa del verano de Telecinco, la madre de Rubiales ha pedido que se haga justicia con su hijo y que Hermoso "rectifique y diga la verdad". "Estoy bien, creo mucho en Dios y pido la verdad. Estaré hasta que mi cuerpo aguante", ha añadido Ángeles Béjar.

"Dimisión inmediata"

La Comisión de Presidentes de Federaciones Autonómicas y Territoriales de la RFEF pidió este lunes a Luis Rubiales que presente su dimisión "de manera inmediata" como presidente de dicho organismo, tras el beso a la jugadora Jenni Hermoso en la celebración del Mundial. "Después de los últimos acontecimientos y los inaceptables comportamientos que han dañado con gravedad la imagen del fútbol español, los presidentes solicitan que, de manera inmediata, D. Luis Rubiales presente su dimisión como presidente de la RFEF", indican en un comunicado tras la reunión celebrada este lunes en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.

Asimismo, las Territoriales han instado al presidente en funciones de la RFEF, Pedro Rocha, a que se retire de inmediato la última comunicación en nombre de la federación con FIFA y UEFA que han conocido este lunes y le han dado su respaldo unánime para que lidere una nueva etapa "donde el diálogo y la reconciliación con todas las instituciones del fútbol sea la línea a seguir". Dicha comunicación haría referencia al recurso por una presunta injerencia del Gobierno en el 'caso Rubiales', aunque el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Víctor Francos, indicó este lunes que la UEFA "no" había recibido dicha demanda que podría poner en riesgo la participación de la selección en competiciones internacionales.