La Comunidad de Madrid publicará este viernes un decreto que ampliará de cuatro a seis el límite de comensales que puede haber en las mesas de las terrazas, también obligará el uso de mascarillas en el interior de bares y restaurantes, excepto para comer y beber.
La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha avanzado estas novedades durante una reunión telemática celebrada este lunes con representantes de la hostelería, con quienes se ha comprometido a retrasar "en cuanto se pueda y los datos de incidencia mejoren" el toque de queda a las doce de la noche, han informado fuentes del Gobierno de Madrid. También han analizado la posibilidad de priorizar en el plan de vacunación a sectores "altamente expuestos" como camareros, profesores, dependientes o taxistas, una vez finalice la inoculación a la población de riesgo y comience la segunda fase de vacunación masiva a la población.
Desde el viernes la mascarilla será obligatoria en bares y restaurantes. Y la ventilación -preferentemente natural-, un derecho de los consumidores.
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) February 1, 2021
Pronto recuperamos las horas de los toques de queda. En terrazas las mesas vuelven a 6 comensales.
La Comunidad de Madrid adelantó desde el lunes 25 de enero el toque de queda de las 23.00 a las 22.00 horas, el cierre de la hostelería y establecimientos no esenciales de las 22.00 a las 21.00 horas, y limitó el número de comensales en las mesas de bares y restaurantes a cuatro personas tanto en el interior como en terraza. A partir del viernes, se amplía de 4 a 6 el número de comensales por mesa en las terrazas y se concretará con una regulación "más amplia y específica" el uso de la mascarilla en el interior de bares y restaurantes, que ya estaba recogido en una orden de la Consejería de Sanidad el 29 de julio.
Esa orden establecía ya la obligatoriedad del uso de la mascarilla de todas las personas mayores de seis años "en la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público, con independencia del mantenimiento de la distancia física interpersonal de seguridad", salvo durante el consumo de bebidas y alimentos. El Gobierno madrileño dará más concreción a esta norma para hacer "todo lo que está en nuestras manos para mantener abierta la hostelería (...), a pesar de los pulsos políticos que nos llegan desde todas las instituciones", ha trasladado Ayuso a los representantes del sector.
Junto a las ayudas de 85 millones anunciadas por el Gobierno de Madrid para la hostelería, Ayuso también ha avanzado la puesta en marcha de un plan específico para ayudar al distrito Centro de la capital, que se ha visto especialmente afectado por la caída del turismo. Los representantes de la hostelería han reclamado a la presidenta "menos burocracia" para que esas ayudas sean "ágiles" y poder poner frente a una situación en la que los hosteleros "no se pueden endeudar más", ha indicado a Efe el director general de la Asociación de Empresarios de Hostelería de la Comunidad de Madrid, Juan José Blardony.