Josep Lluís Trapero, el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra fue uno de los invitados de Pilar Rahola a la fiesta que hizo en su casa con varias personalidades, entre las cuales, el presidente Carles Puigdemont. Trapero no sólo fue a la paella, sino que fue el cocinero. Y a la sobremesa cogió la guitarra y entonó el "Paraules d'amor", con el resto de invitados haciéndole los coros. El vídeo y la foto donde Trapero sale con todos los invitados, los hizo públicos la misma anfitriona, Pilar Rahola. Y eso ha provocado malestar en el cuerpo, y también cierta sorpresa. Sobre todo por el contexto actual, después de que el presidente de la Generalitat hiciera público que había que desobedecer el Tribunal Constitucional, los agentes de los Mossos d'Esquadra encuentran totalmente inoportunas las imágenes que pueden cuestionar la neutralidad política de la policía catalana.
"Se está cuestionando nuestra neutralidad política. Y viendo las imágenes la equidistancia no existe", sentencia Valentin Anadón del sindicato mayoritario de los Mossos, SAP-FEPOL. Fuentes policiales apuntan que las imágenes "ponen en cuestión la imparcialidad del cuerpo". La situación interna en los Mossos y la polémica a raíz de la presencia de Trapero en el fiestón de Rahola ha hecho que algunos sindicatos hayan preferido opinar sobre la situación pero sin hacer comunicado ni hacer público su nombre, con todo en declaraciones a El Nacional apuntan que Trapero "queda retratado".
Los sindicatos encuentran muy inoportuno que Trapero aparezca en el "retrato de familia de las personas más importantes del país". "Lo sitúa en el centro del poder en Catalunya", en un momento en que "tenemos que ser institucionalmente muy correctos", apuntan las mismas fuentes.
El otro debate es si Trapero puede optar ahora a ser el Mayor del cuerpo. El cargo vitalicio desapareció hace unos años, cuando el único Mayor que ha habido a los Mossos, Joan Unión, (que ocupó el cargo desde el 2004 hasta el 2007) se jubiló. Fue justo cuando llegó a la conselleria Joan Saura. Ahora, Jordi Jané plantea volver a recuperar el cargo de máximo responsable de los Mossos y todo hacía indicar que nombrarían el actual comisario jefe Josep Lluís Trapero. Después de aparecer tocando la guitarra al lado del presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, Trapero "no puede ser Mayor" apuntan algunas fuentes internas del cuerpo. El rango de Mayor no permite al conseller cambiar el máximo responsable del cuerpo. Una vez nombrado es vitalicio hasta que el mismo interesado renuncia o se jubila porque según la ley de la Policía catalana, los agentes no se pueden degradar, no pueden bajar de rango. El director general de la policía, Albert Batlle, anunció a principios del mes de Marzo a todos los mandos, en una reunión en el complejo Egara, que había resuelto recuperar el rango y se había decidido que quien lo tenía que ocupar es el actual comisario jefe Josep Lluís Trapero.
Desde la Dirección General de la Policía no se quiere hablar del tema. No ha habido ningún análisis interno sobre los hechos y se argumenta que "es un tema privado" y que "las imágenes no las ha colgado él". Fuentes del Departamento desvinculan totalmente el cargo que ostenta Trapero como máximo responsable uniformado del cuerpo de los Mossos d'Esquadra de lo que haga en sus horas libres y vacaciones.
24 horas mosso
Los policías son policías 24 horas al día. Por eso todavía sorprende más internamente que el comissario jefe no haya tenido cuidado en controlar la difusión de las imágenes. Los sindicatos recuerdan que "tenemos una policía rígida, donde la imagen se ha valorado mucho y se pide un plus de saber estar". Por eso, en este sentido, "estamos sorprendidos", dicen. "Institucionalmente no es una foto acertada", añaden.
"La imagen no es acertada. Aunque es privada, y está fuera de servicio, es el jefe del cuerpo, le guste o no", dicen fuentes del cuerpo. "Su figura representa todo el cuerpo", insiste Valentín Anadón, en que puntualiza que la imagen puede cuestionar la neutralidad del cuerpo.
Algunos sindicatos explican que ha habido expedientes para difundir imágenes en las redes sociales que no han gustado a la dirección General de la Policía y que están reguladas por el Decreto de Imagen de los Mossos. Por eso ahora no se entiende cómo el departamento no ha dicho nada sobre la imagen de Trapero ni el mismo comisario jefe tomó precauciones para evitar la difusión de los vídeos y las fotos.
La Dirección General de la Policía dice que nunca se ha expedientado ningún mosso para colgar imágenes comprometidas vestido de paisano.
Trapero i Cadaqués
Josep Lluís Trapero es un habitual de Cadaqués. Los que lo conocen saben que hace algunas escapadas durante todo el año invitado por dos amigos suyos: Bonaventura Clotet, que también estaba en la fiesta, y la familia Tous. Trapero no tiene casa en Cadaqués, pero se aloja en casa de los amigos.
También es conocida la cordialidad del comissario jefe de los Mossos con Pilar Rahola. Una cosa y la otra han llevado cada año a Josep Lluís Trapero a la fiesta de verano en Cadaqués donde hace de cocinero con dos ayudantes excepcionales, su buen amigo Clotet y el periodista Joan Vehils, marido de la también periodista Helena Garcia Melero. Por eso, en la fiesta, los tres van con la misma camisa.
Josep Lluís Trapero no es un comisario jefe de los Mossos discreto. Su carisma y su manera de ser el fan protagonista allí donde pone los pies. El día de las escuadras, incluso, donde alguna vez a acabado recitando poesía. Que hiciera la paella y que tocara la guitarra y cantara, no sale en este sentido, del guion de su personalidad.
Rahola y los Mossos
Pilar Rahola es una firme defensora del cuerpo de los Mossos d'Esquadra. Cree hasta el extremo en la policía catalana y siempre ha roto una lanza a su favor públicamente en todos los medios donde trabaja como tertuliana y columnista. Su apoyo al cuerpo la llevó a ser la Mossa del año en el 2014. Un premio de nueva creación que reconocía el papel de Rahola en defensa de los Mossos.
Amiga de agentes, mandos, sindicados y director políticos, Rahola ha defendido tanto a los que dirigen el cuerpo como a los que están en el último rango cumpliendo órdenes sin distinción. Por eso, ahora, ha sorprendido en algunos sectores que haya estado ella la que decidiera difundir las imágenes. "La difusión de la foto nos extraña", apuntan.