Los ganaderos del Pallars Sobirà se han manifestado este domingo en Llessui para decir "no al oso". De esta manera han querido expresar el malestar del sector y la preocupación que representa la presencia del hueso en la zona del país, la montaña de Llessui, Seurí y Caregue, con más densidad de animales durante el verano, con más de 25.000 ejemplares entre ovejas, vacas y caballos. "Basta ya de mentiras", "El oso sí que ataca", "Menos fauna salvaje. Más ganadería extensiva" o "Osos en el Parlament. Políticos en el zoológico" son algunos gritos que se han podido sentir.
Para los ganaderos, la presencia del hueso al Pirineo y de otros animales salvajes condiciona la continuidad de muchas explotaciones ganaderas y el día a día de muchos campesinos. Durante la concentración se ha dicho también que la presencia del oso puede provocar el abandono del aprovechamiento de los pastos estivales con la consecuente pérdida de biodiversidad.
El objetivo de la concentración, además de mostrar a uno "no rotundo" a la presencia del hueso a las montañas del Pirineo, era cerrar filas entre el sector para afrontar problemáticas comunes y luchar contra la "falta de consideración por la gente del territorio desde hace décadas".
Por otra parte, todos los ganaderos han tenido un recuerdo especial hacia los campesinos afectados por los incendios y han reclamado a la administración políticas reales para la limpieza de bosques y la prevención de incendios. Durante la concentración se ha leído un manifiesto en que se ha reivindicado la ganadería como "pieza clave a la hora de favorecer y conservar la biodiversidad a través del mantenimiento de pastos naturales".