Este próximo martes el colectivo antisistema y okupa de la ciudad de Barcelona se ha citado en el centro de Barcelona. El próximo día 23, a las siete de la tarde, han convocado una manifestación que tiene previsto su inicio en la plaza Universitat y todavía sin recorrido público. Esta manifestación, que se ha convocado desde la misma casa okupada de la Ruina, en la Bonanova, en la parte alta de Barcelona, busca llevar al centro de la ciudad la confrontación que tienen iniciada con grupúsculos de extrema derecha y algunos partidos que se presentan a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo.
La convocatoria llama a "parar el fascismo" y asegura que, hacerlo, es una "cosa de todos". En el cartel de la manifestación okupa de este próximo 23 de mayo, los organizadores lamentan "el alzamiento" de la ultraderecha y los discursos "de odio" y reclaman "luchar" contra el "racismo, la LGBTI-fobia y el machismo". Aunque el cartel de la convocatoria no está firmado por ningún colectivo concreto y tampoco se ha hecho oficial la comunicación a Interior de la manifestación, el cartel de la manifestación se ha publicado en las redes sociales que administran las personas de la Ruina y otros colectivos próximos, como el Grupo de Vivienda de Sants, se han sumado.
Incidentes durante la manifestación en la Bonanova
Después de los incidentes que se vivieron el pasado 11 de mayo, en la manifestación que se hizo desde Lesseps hasta la Bonanova, para protestar contra la manifestación antiokupas que se había organizado en este barrio de la ciudad, los Mossos preparan un dispositivo para intentar evitar que se repitan los incidentes. Durante la marcha de la semana pasada los prookupas se saltaron el recorrido que habían marcado los Mossos d'Esquadra y se enfrentaron a la policía en la calle del Solsonès, provocando cargas de la policía. Cuando la manifestación retornó hacia Gracia, de donde había salido, un grupo de alborotadores, con las caras tapadas y con martillos, reventaron un total de once establecimientos, sobre todo, bancos e inmobiliarias. La policía catalana abrió una investigación por desórdenes públicos y por daños, pero, hoy por hoy, no consta que se hayan producido detenciones.
A la espera de poder aclarar el recorrido que hará la marcha del próximo martes 23 de mayo, los Mossos diseñarán un dispositivo para evitar incidentes, como se hace siempre en manifestaciones de este tipo, de las cuales, si bien no han sido informadas, tienen conocimiento por sus especialistas en Información. En otras manifestaciones se ha evitado que la marcha entre en dirección al Raval y la zona del Gótico, una zona complicada donde es más complicada la actuación policial.