Manuel Valls ha perdido los nervios cuando el flamante ganador del Premi Josep Pla, Marc Artigau, ha recordado durante su discurso de agradecimiento a los presos políticos y a los exiliados catalanes.
Un hecho iba de boca en boca de periodistas y escritores reunidos a la tradicional cena del Premi Nadal, que este año llegaba a la 75ª edición: El grito de Manuel Valls cuando Marc Artigau, ganador del premio Josep Pla por La vigília, ha afirmado que "la realidad no la podemos reescribir y de aquí muchos años nos dará vergüenza todo". ¡Un "eso ya lo veremos"! ha resonado entre el silencio y la indiferencia del salón donde autoridades y otros personajes del mundo de la política, la cultura, la sociedad y los medios escuchando el discurso de Artigau, pronunciado en otra sala. Ante la indiferencia general, Valls se ha reafirmado, también a gritos, con un "pesados!" impropio de alguien que aspira a la alcaldía de Barcelona.
La periodista y finalista del Premio Planeta Pilar Eyre se sentaba en la misma mesa que Valls y ha ofrecido su testigo presencial en Twitter, según el cual, además, Valls habría intentado enfrentarse al expresident de la Generalitat Artur Mas, que se sentaba en la mesa presidencial, junto con el también expresident José Montilla, la consellera Laura Borràs y la alcaldesa de Barcelona, y habría buscado la complicidad de una sala que ha preferido ignorarlo.
Al final de la cena, visiblemente molesto, Valls se habría dirigido a la Delegada del Gobierno Teresa Cunillera, una de las autoridades presentes en el acto, reprochándole cómo permitía aquello, refiriéndose al discurso de Artigau. La consellera de Cultura Laura Borràs, testigo presencial, ha querido replicar el exprimer ministro francés asegurando que "seguiremos siendo tan pesados como haga falta reivindicando la justicia y la libertad. ¡Somos demócratas!".