Cuesta encontrar agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil que quieran ser destinados a Catalunya. Es una realidad que hace años que sufren estos dos cuerpos estatales que operan en Catalunya.
La dificultad en encontrar agentes, sin embargo, aunque desde algunos sectores se ha querido vender por la "peligrosidad" y "conflictividad" del servicio en territorio catalán, el ministerio del Interior sabe perfectamente que es por la falta de posiciones interesantes para la carrera policial en estos dos cuerpos que se ofrecen actualmente en Catalunya, dónde la mayoría de las competencias las tienen los Mossos d'Esquadra.
En el caso de la Guardia Civil, faltan para completar una quinta parte de los 4.000 agentes que están previstos que den servicio en Catalunya. Desde hace años, para conseguir un relato de conflictividad, partidos españolistas y asociaciones y sindicatos policiales de la Guardia Civil y la Policía Nacional reclaman en Interior que al igual que se hace en el País Vasco, se pague también un plus a los agentes que son enviados a Catalunya y a la zona de Gibraltar.
Catalunya 'Zona de Especialidad Singularidad'
De esta manera, aseguran, a los agentes que ahora no quieren ser destinados a estos dos lugares, tengan un incentivo económico. Este plus se podría cobrar si el Ministerio considera Catalunya una 'Zona de Especialidad Singularidad' y comporta un incremento sustancial en la nómina que recibirían los agentes que trabajen en Catalunya.
Ahora, según ha detallado el sindicato JUCIL, la asociación mayoritaria de trabajadores de la Guardia Civil, el ministro del Interior español, Fernando Grande-Marlaska, está terminando la orden para considerar Catalunya una 'Zona de Especialidad Singularidad' y que los agentes puedan cobrar este plus.
La resolución de Interior, según el sindicato, se encuentra "muy avanzada" según les ha comunicado el ministro en una reunión que han mantenido esta semana. Interior también contempla esta opción por el Campo de Gibraltar, donde la policía mantiene una guerra abierta con los narcotraficantes que entran desde Marruecos.
Los partidos españoles han visto en esta jugada equiparar el País Vasco de ETA con Catalunya, generando un relato de violencia que es falso.
Miedo a perder Alguaire y la competencia en el mar
Desde JUCIL también han planteado al ministro Marlaska el temor de su asociación que la Guardia Civil pierda el control de la seguridad y el control fiscal que, hasta la fecha, están haciendo ellos en el Aeropuerto de Lleida-Alguaire.
Imagen de archivo de una de las embarcaciones de la Unidad Marítima de los Mossos d'Esquadra / Interior
En el encuentro que mantuvieron sindicato y dirección política de Interior, desde JUCIL también recordaron al ministro que la competencia de las aguas exteriores, también en Catalunya, es de la Guardia Civil y que evite que los Mossos d'Esquadra, que desde hace poco tiempo tienen la Unidad Marítima, se los robe espacio.