El Servei Català de Trànsit ha optado por la vía rápida y ha prohibido que los camiones circulen por la AP-7 los domingos por la tarde durante el mes de septiembre. Es la solución que han encontrado para evitar atascos y las colas como las que hubo el fin de semana pasado, el primero sin peajes. La restricción se aplicará cada domingo del mes de septiembre de 17 h a 22 h.
Una vez abolidas las barreras y el pago, el tráfico ha aumentado considerablemente. Muchos coches que antes utilizaban vías alternativas ahora se incorporan a la autopista. Además, la vuelta de la normalidad postcovid ha hecho crecer también la movilidad.
El domingo pasado hubo más de 30 kilómetros de cola que nadie supo prever. Para volver a evitar el colapso pospeaje, el Govern ha establecido una serie de medidas como la restricción para los camiones que ya ha hecho levantar la voz de los transportistas. Hoy el director del Servei Català de Trànsit, Ramon Lamiel, ha tenido que salir a explicar las medidas que ayer se le filtraron y ha añadido a la lista carriles adicionales y abrir más viales a los peajes. Habrá 11 viales abiertos en el antiguo peaje de la Roca del Vallès dirección Barcelona y 8 viales en Martorell dirección Barcelona para mejorar la circulación, aunque el director del Servei Català de Trànsit ha avisado de que "no se pueden abrir muchos viales porque al salir de los peajes puede haber accidentes".
Estos carriles adicionales se complementarán con paneles de velocidad visibles "para que los usuarios de la vía vayan disminuyendo la velocidad cuando se aproximan a las estructuras de los peajes" según Lamiel.
Con respecto a los carriles adicionales, se abre un vial entre Sant Celoni y la Roca en la AP-7 norte, y otro entre Vilafranca y Martorell, en la AP-7 sur. Además habrá un carril segregado para camiones de menos de 7,5 toneladas, que son las que tienen prohibido circular por la autopista. "Pasada la fiesta de la Mercè se tendrá que buscar otro sistema para dar la fluidez que se quiere dar en las vías", ha dicho el director del Servei Català de Trànsit.
Lamiel ha recordado que la restricción se aplica sólo a la carretera AP-7 y que el resto de las vías continúan abiertas para la circulación de este tipo de vehículos, y que los camiones de 7,5 toneladas o menos dispondrán de un carril segregado a la derecha "para que circulen con tranquilidad". El director del SCT también ha reclamado a los concesionarios que agilicen el desmontaje de las estructuras de los peajes,que ahora mismo hacen ralentizar la circulación.
Lamiel ha asegurado que con estas medidas se pretende que el tráfico sea "un poco más ágil y seguro", y ha insistido en el hecho de que hay otras alternativas de circulación aparte de la carretera AP-7 y que se pueden utilizar.
Camioneros indignados
Los camioneros consideran que se los culpa a ellos de las colas del domingo pasado y que el Gobierno improvisa. Ni en el CECAT ni en el COT, los dos sindicatos que agrupan el sector, la medida se ha visto con buenos ojos. Primero, porque dicen que siempre son ellos "los que tienen que pagar" cuando hay problemas de tráfico y piden diálogo y soluciones.
El presidente de CETCAT, Eduard Ayach, considera que esta es una "muestra más" de falta de respeto de las administraciones por el transporte de mercancías. Además, las asociaciones CETCAT y COT creen que la restricción es una "solución improvisada" a un problema puntual de un fin de semana. "El levantamiento de los peajes hoy nos está saliendo caro", ha concluido Ayach. Las dos entidades portavoces del mundo del transporte piden "diálogo" con las administraciones y se quejan de falta de previsión por la finalización de la concesión de la AP-7.
Hace prácticamente ocho años que los camiones sólo pueden circular por la autopista en muchos tramos de Catalunya y por eso, "el volumen de camiones en la carretera de hoy es el mismo que el de hace cinco años", dice Ayach. Por eso creen que el problema no es la circulación de mercancías, sino "los turismos" que han circulado de forma más abundante por la autopista, ahora que es gratuita.
El presidente de la CETCAT también reprocha al Gobierno que impida circular a los camiones por la N-II, la N-260 y ahora, también, la AP-7. Estas restricciones suponen "sacar las herramientas" a un sector que ha sido esencial durante la pandemia. A pesar de todo, creen que la Generalitat los está "criminalizando" con constantes restricciones y medidas. "El levantamiento de los peajes hoy nos está saliendo caro", ha añadido Eduard Ayach.
El portavoz de la COT, Carles Folchy, ha exigido "diálogo" con las administraciones a la hora de buscar salidas a los problemas de circulación. Critica que ningún responsable político les haya comunicado la medida y, por lo tanto, no han tenido margen de maniobra para proponer alternativas. Folchy también ha pedido que el Gobierno proponga un interlocutor para poder negociar futuras medidas.
Todo esto hace que el sector del transporte de mercancías se sienta "menospreciado" y afirman que siempre son quienes "acaban pagando la improvisación" de las administraciones. "No hay motivos suficientes para romper el derecho de la libre circulación", ha lamentado el portavoz de la COT. Los transportistas aseguran que la medida obligará a adelantar los desplazamientos de los transportistas para evitar que la restricción los pille en la carretera. Eso quiere decir que todos aquellos que tenían que salir el domingo, lo harán el sábado. Además, alertan de un posible colapso de camiones en la Jonquera para esperar atravesar la frontera con Francia.