La Audiencia de Barcelona ha condenado al futbolista Leo Messi y a su padre, Jorge Horacio Messi, a 21 meses de prisión por fraude fiscal y a una multa de 2.093.001,55 euros por tres delitos de fraude fiscal. A pesar de la condena, no tendrán que ir a prisión porque la pena es menor a dos años y ninguno de los dos tiene antecedentes.
El jugador, que devolvió la cantidad defraudada antes del juicio y pagó una multa, declaró que era su padre quien se encargaba de la gestión económica. Messi y su padre estaban acusados de tres delitos contra Hacienda por haber defraudado en las declaraciones del IRPF del 2007 i del 2008 la gestión de los derechos de imagen del futbolista.
El juez ve probado que Messi omitió declarar a Hacienda, en las declaraciones del 2007, 2008 y 2009, los ingresos por sus derechos de imagen. Aunque el delantero del Barça argumentó en el juicio que él no sabía nada y que hacía todo lo que le decía su padre, el juez finalmente ha acabado condenando al crack azulgrana.
La sentencia es clara y dice que tanto Messi como su padre tejieron "una compleja maniobra negocial que no tenía ninguna finalidad más que la de ocultar a Hacienda los ingresos para la maniobra de explotación y quien era el verdadero perceptor de los mismos". Añade que "se simularon una serie de operaciones que se suceden en el tiempo y que tenían como elemento característico un engaño a Hacienda materializado en una ocultación maliciosa de datos fiscalmente relevantes".
Al Tribunal no le cuadran las operaciones y los contratos firmados y pone en cuestión que no hubiera voluntad de estafar a Hacienda. La sentencia vierte una serie de dudas: "En la cesión de los derechos del jugador se aprecia una apariencia contractual que no parece guarde estrecha y congruente relación con la auténtica voluntad de los que intervienen". Desconfía de los "precios por la cesión de derechos de imagen de un jugador como Lionel Messi, eran o bien ridículos o bien inexistentes". Y añade que "algunas de las fechas de los contratos contradicen los de otros o fían imposible su eficacia".
Ignorancia deliberada
¿Sabía Messi lo que pasaba? La estrategia de la defensa siempre ha sido la misma. Tanto durante la instrucción como en el juicio, Lionel Messi siempre ha declarado que no sabía nada y que había delegado en su padre todas las responsabilidades sobre la gestión de sus ingresos, desconociendo cómo se lo hacían su padre y sus asesores para tener toda la contabilidad al día y el pago de los impuestos.
Pero el tribunal no se lo ha creído. Es más, ha buscado la jurisprudencia en sentencias anteriores para demostrar que "existe un deber de conocer, que impide cerrar los ojos ante circunstancias sospechosas, y que el dolo está en el hecho, cuando la lógica, la ciencia y la experiencia común indican que nadie se presta a determinados negocios sin percibir una contraprestación, señalando que en los delitos previstos, en nuestro código, incurre en irresponsabilidad, también quien actúa con ignorancia deliberada.
La sentencia insiste en que Lionel Messi debía tener la sospecha de que los ingresos derivados de sus derechos de imagen no tenían un origen claro y nítido "desde el momento en que se cobraban otras sociedades y el jugador era el perceptor". El tribunal es duro con Messi y concluye que "la información que el acusado evitó tener, estaba en realidad a su alcance" y que desde 2005 "decidió seguir en la ignorancia a lo largo del tiempo".
La condena
Estas son las multas que tendrá que pagar cada uno:
Pena impuesta para Lionel Andrés Messi:
- Por el delito de defraudación en relación en el IRPF del ejercicio de 2007: pena de 7 meses de prisión y multa de 532.313,31€
- Por el delito de defraudación en relación en el IRPF del ejercicio de 2008: pena de 7 meses de prisión y multa de 792.300,54€
- Por el delito de defraudación en relación en el IRPF del ejercicio de 2009: pena de 7 meses de prisión y multa de 768.387,70€
Pena impuesta para Jorge Messi:
- Por el delito de defraudación en relación en el IRPF del ejercicio de 2007: pena de 7 meses de prisión y multa de 532.313,31€
- Por el delito de defraudación en relación en el IRPF del ejercicio de 2008: pena de 7 meses de prisión y multa de 532.313,31€
- Por el delito de defraudación en relación en el IRPF del ejercicio de 2009: pena de 7 meses de prisión y multa de 532.313,31€