Es una reivindicación histórica y hoy, por fin, el metro llega al barrio de la Marina. Después de más de 40 años reivindicando este medio de transporte, los vecinos verán cómo la L10 sur se detiene en la zona.
Hoy se ponen en marcha dos nuevas estaciones: la del Fuego y la de Foneria, son 2 kilómetros que abarcan el eje del paseo de la Zona Franca. La nueva línea contará con tres estaciones más que se comparten con la L9: Collblanc, Torrassa y Can Tries-Gornal.
Este servicio de metro es automático, por lo tanto, sin conductor. El trayecto entre la primera y la última estación, de Fuego en Collblanc, tiene una duración de nueve minutos. Los convoyes pasarán cada 7 minutos y 20 segundos durante los días laborables, igual que los de la L9.
Fiesta inaugural
La nueva línea se inaugurará en las 12:15 en un primer viaje en el qué participarán al presidente de la Generalitat, Quim Torra, el vicepresidente y conseller de Economía y Hacienda, Pere Aragonès, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Después de la inauguración institucional, por la tarde habrá una fiesta vecinal para celebrar la llegada del metro en esta zona. A partir de las 6 de la tarde, las entidades de la Marina han organizado varias actividades a la estación de Fonerial. La fiesta empezará con un espectáculo de animación infantil a cargo de la compañía Ambauka. Seguirá con la lectura de un manifiesto y acto seguido hay habrá la actuación de los Grallioli, un grupo que mezcla la música electrónica con las gralles. A las 9 de la noche se proyectará un vídeo sobre la lucha de los vecinos para conseguir acercar el barrio a la ciudad. También se mostrará como funciona l'L10 Sur y cuál ha sido la cronología de la lucha vecinal.
Reivindicación historica
Los vecinos de la Marina hace 40 que esperan y reivindican la llegada del metro. El primer proyecto fecha de 1971 y la aprobación de la línea 9 (que ahora también es la L10), de 1999. En el 2005, después de años de movilizaciones y pancartas en los balcones con el eslogan "Metro ya"!, la tuneladora empezó a trabajar. Las obras pero se detuvieron en el 2011 cuando la Generalitat decidió priorizar la llegada del metro al aeropuerto. Hace un par de años, el Ayuntamiento acordó con la Generalitat la compra de varios inmuebles para que, con los 40 millones de euros que aportaba, se pudiera poner en marcha l'L10 sur.