La publicación en mayo de un estudio que mostraba cómo se habían encontrado microplásticos en testículos humanos y de animales, ha levantado polvareda. No solo por el alarmante dato de que en todo el cuerpo humano se encuentran estas partículas, sino por el impacto que estas pueden tener. Entre las preguntas que se han generado a raíz de este estudio están: ¿qué impacto tienen los microplásticos en la disfunción eréctil? Una nueva investigación publicada en la revista científica IJIR apunta que el pene es especialmente sensible a la presencia de microplásticos por el tipo de tejido que lo compone y el gran número de vasos sanguíneos.
El estudio evaluó el tejido extraído a cinco hombres que habían sido sometidos a una cirugía relacionada con la disfunción eréctil. Se encontraron microplásticos en cuatro casos, donde el tipo de plásticos localizados son los habituales en envases de bebidas y alimentos. Si bien los investigadores explican que la disfunción eréctil es multifactorial, también destacan que los microplásticos son una amenaza. "Hemos encontrado que los microplásticos estaban presentes en el músculo liso del pene. Lo único que sabemos es que se supone que no tienen que estar y sospechamos que podría provocar una disfunción del músculo liso", resume uno de los autores de la investigación, Ranjith Ramasamy. El investigador de la Universidad de Miami sostiene que hace falta más investigación para distinguir el impacto completo que tienen estos residuos, sobre todo en un contexto en el que cae la fertilidad masculina en todo el mundo.
"Como sociedad, tenemos que ser conscientes de que beber agua de botellas de agua de plástico, consumir comida para llevar en recipientes de plástico y, peor todavía, poner alimentos en el microondas en recipientes de plástico, contribuyen a tener cosas en nuestro cuerpo que no deberían estar allí. Y el pene es el único órgano al cual todo el mundo prestará atención", sentencia Ramasamy en declaraciones a The Guardian. Tanto él como sus compañeros de profesión abogan por más investigación sobre los efectos de los microplásticos en el cuerpo humano.
Microplásticos en todas partes
Los microplásticos están en todas partes, desde el hielo de la Antártida hasta los alimentos. La presencia de microplásticos en el cuerpo representa muchos riesgos, por ejemplo, la acumulación en las venas y arterias dispara el riesgo de sufrir un ictus o un ataque cardiaco. Así lo expone un estudio liderado por la Universidad de Campania Luigi Vanvitelli (Italia). Los investigadores analizaron las placas de grasa extraídas de los vasos sanguíneos de pacientes con enfermedades arteriales y encontraron que más de la mitad tenían depósitos contaminados con partículas diminutas de polietileno o cloruro de polivinilo (PVC).
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