Cada año, Carnaval 2024 llega con el Jueves Lardero y acaba el Miércoles de Ceniza. Estas fechas van cambiando cada año entre febrero y marzo y, concretamente, el Miércoles de Ceniza mujer inicio a la Cuaresma, que es la cuenta atrás hacia Semana Santa. Si no sabes muy bien de dónde viene toda esta tradición cristiana, que es el entierro de la sardina y que tiene que ver con el Carnaval, ¡te lo explicamos todo a continuación!
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Miércoles de Ceniza 2024: Cuándo es y qué tiene que ver con el Jueves Lardero
Aunque Carnaval es una celebración pagana, le precede el Jueves Lardero, día en que se consumen los platos que posteriormente se prohíben en la Cuaresma —tradición cristiana—, o sea alimentos de origen animal, especialmente la butifarra de huevo, típica en Catalunya este día. De nuevo, la festividad carnavalesca se cierra con el Miércoles de Ceniza, también vinculado a la religión católica, y el entierro de la sardina, ritual irónico que pone fin a la alegría y fiesta.
La Cuaresma, en la mayoría de calendarios litúrgicos, como el católico, anglicano y protestante, entre otros, se celebra 40 días antes del Jueves Santo, que este año cae el día 28 de marzo, marcando el Miércoles de Ceniza 2024, que es una fecha movible —puede celebrarse entre el 4 de febrero y el 10 de marzo—, el 14 de febrero. Además, el ritual de imponer la ceniza en el frente de los creyentes —proveniente de la cremación de los ramos bendecidos en Domingo de Ramos del año anterior— los recuerda la muerte y que en algún momento el cuerpo se convierte en polvo.
Origen del entierro de la sardina para despedir al Carnaval
Coincidiendo con este rito litúrgico tan arraigado en la religión cristiana, se produce el entierro de la sardina, tradicional en España y algunos países de América Latina, que se celebra para despedir al Carnaval con magnificencia antes de empezar la Cuaresma y sus sacrificios hasta Pascua. Se trata de un desfile con connotación irónica en el cual se pasean carrozas con personas vestidas de luto que lloran y pasean el ataúd de una sardina muerta, para ironizar sobre la idea de acabar con la alegría carnavalesca hasta el año siguiente.
Su origen es bastante complicado de determinar: el entierro de la sardina se popularizó a partir del siglo XVIII, desde cuando se tiene constancia de los primeros manuscritos sobre la celebración. Hay varias teorías, entre las cuales destaca una que apunta que, cuando reinaba Carlos II, ordenó traer un cargamento de sardinas en Madrid para la celebración de la Cuaresma, que resultó estar en mal estado y que tuvo que ser enterrado para evitar que el olor se esparciera por toda la ciudad. Otra teoría consolidada es la que atribuye la tradición al ministro de Carlos III, Jerónimo Grimaldi, que tenía por mote "la sardina" para estar delgado. Grimaldi abandonaba el Palacio Real en el inicio de la Cuaresma, momento en el cual el pueblo ironizó despidiéndolo con una fiesta de máscaras.