Cerca de un millar de mujeres periodistas se han concentrado este viernes por la mañana en los Jardines Pequeños de Gracia de Barcelona en el marco de la huelga feminista del 8-M, día internacional de la Mujer.
A la concentración, llena de carteles y globos de color lila —el color que representa el feminismo— han participado profesionales del periodismo de la mayoría de medios de comunicación presentes en la capital catalana, que han reclamado la erradicación de todas las violencias machistas, han denunciado la brecha salarial del sector, casos de acoso sexual y que los ataques en el entorno de la comunicación digital "por el solo hecho de ser mujeres se ha intensificado" y, en cambio, "continúan con una casi completa impunidad".
En el acto para reivindicar el 8-M, conducido por Ariadna Oltra, varias periodistas han leído un manifiesto conjuntamente y también han tenido un recuerdo para sus compañeras muertas por violencia de género. Las periodistas concentradas también han instado las direcciones editoriales y de opinión de los medios "para que dejen de emitir opiniones machistas y estereotipadas" y a llevar a cabo una "superación real de la brecha salarial" y penalizar aquellas empresas que no paguen el mismo salario a hombres y mujeres para un mismo trabajo.
En el acto, se ha habilitado un buzón de denuncias y se han reproducido situaciones reales vividas en las redacciones como un jefe pida a una mujer periodista de ir a cenar "para hablar del incremento de sueldo", que un diputado ante una pregunta difícil responda "eres tan guapa" o que a una periodista que salía en la televisión se le lance que "joven eres muy guapa".
Las periodistas concentradas en los Jardines Pequeños de Gracia han exteriorizado estos y otros casos y han subrayado la necesidad de acabar con las coberturas informativas sobre casos de violencia machista con "tratamiento sexista y culpabilizador hacia las víctimas". "El lenguaje utilizado reproduce el discurso asediador, como cuestionar la veracidad de la víctima, o difamarla donante detalles de su vida que no aportan ninguna información sino juicios de valor", advierten en el manifiesto.
En este sentido, la periodista freelance Esperanza Escribano ha recordado que en casos de violencia doméstica "no nos morimos, nos matan". Además, ha pedido una "formación para los trabajadores de los medios porque hacemos de una vez un periodismo feminista". Aparte, también ha criticado que la presencia de mujeres en los medios sea muy reducida "a pesar de ser mayoría en las redacciones", además de los contratos parciales y la "precarización".
Por su parte, la periodista y secretaria de Igualdad del Sindicato de Periodistas de Catalunya, Laia Serra, ha ejemplarizado el exceso de estereotipos en la televisión y que un "hombre maduro con su pelo canoso y que no importa si tiene barriga o no aparezca" en pantalla "mientras las mujeres llega un momento que desaparecen. "No significa que las periodistas bellas no lo hagan bien, pero qué pasa con las otras, se ha preguntado.