Fèlix Millet se presentó ayer al juicio por el caso del Palau de la Música con la misma americana que llevó hace 8 años cuando puso los pies por primera vez para ir a declarar como imputado por el expolio del Palau. Es la americana de las grandes ocasiones y la que se ha puesto los días clave del proceso judicial. También la llevaba en el juicio del caso del hotel del Palau, donde quedó absuelto y donde el primer día se rompió el fémur.
En la segunda jornada del juicio por el caso del Palau, en el vestíbulo del auditorio de la Ciutat de la Justícia, donde Fèlix Millet se esperaba para entrar, y una vez solo, después de estar charlando con su mano derecha, Jordi Montull, atiende a las preguntas de El Nacional:
El Nacional: ¿Cómo es que siempre lleva la misma americana?
Millet hace un gesto con la cara como diciendo no lo sé y levanta las manos.
El Nacional: ¿Le trae suerte o no piensa en ello cuando se viste por la mañana?
Millet: No pienso. De la ropa se ocupa mi mujer.
Fèlix Millet lo dice arrastrando las palabras, flojo y pide que le hablen cerca para oír bien las preguntas.
El Nacional: ¿El miércoles que viene, declarará?
Millet: Declararé.
El Nacional: ¿Pero explicará lo mismo que ya confesó o ampliará la declaración?
Millet: Eso no lo sé todavía. Me tengo que sentar con mi abogado y decidir el qué. Hable con mi abogado.
El Nacional: ¿Qué le parece el pacto al que quiere llegar Montull para reducir las penas de prisión que piden a su hija?
Y aquí Millet ya no quiere hablar más. Levanta los brazos y vuelve a hacer el mismo gesto con la cara que al principio de la conversación.
El ex presidente del Palau de la Música no quiere hablar del caso. Donde se siente más cómodo es en las cuestiones banales, como en la americana, que deja claro que si repite modelito es por decisión de su mujer, Marta Vallès.
La americana de Millet en los juzgados
Fèlix Millet ha cambiado en estos 8 años largos de investigación del caso Palau, más veces de abogado que de americana. En junio del 2010 ya llevaba la americana de cuadritos de pata de gallo marrón cuando fue a declarar con su letrado de entonces, Pau Molins, el mismo letrado que acabó defendiendo a la Infanta Cristina en el caso Nóos.
El año 2014 durante el juicio del caso del hotel del Palau, también se la puso. Esta vez con corbata color champán.
Y ayer, 2017, primer día del juicio del Palau, más de 8 años después de destaparse el caso y de verse por primera vez la americana de lana con cuadritos de pata de gallo, la volvió a lucir.
Fèlix Millet no ha sabido explicar si la americana tiene más de 8 años, o la ha ido renovando y se ha ido comprando la misma. De cerca, sin embargo, no se ve vieja. Si es la original, le ha dado buen resultado.
Millet también repite bufanda. Los dos primeros días ha llevado la misma. Igual que ya hizo en el juicio del caso del hotel del Palau de la Música.
La otra americana
La americana de pata de gallo no es la única que ha llevado Millet a los juzgados, aunque sí que es la que se ha puesto para los días importantes. Tiene otra con un cuadro mayor, tipo galés, y también de color marrón pero más clara.
La llevaba en diciembre de 2010 en una de las declaraciones por el caso hotel del Palau, donde fue con la nueva abogada, Mireia Astor.
Se la puso el primer día del juicio del hotel del Palau, después de romperse el fémur, el año 2014. Y la combinó con una corbata amarilla.
Una americana que, curiosamente, también se puso su mano derecha Jordi Montull un día para ir a declarar a los juzgados. No sabemos si la tienen igual o la birló a Millet por un día.