26 minutos y 17 segundos. Eso es lo que duró una conversación del expresidente del Palau de la Música, Fèlix Millet, en que confesaba que me equivoqué. Millet pasó las grabaciones en El Punt Avui la semana pasada, unos audios en que se pueden escuchar 30 años resumidos en menos de media hora.
"La conclusión es que de un Palau que estaba a punto de caer se pasó a tener un Palau mejor de cuando se inauguró, y en mejores condiciones", decía Millet en la conversación, registrada unos meses antes de que estallara el caso Palau. "Cuando me marché, en la caja había entre 4 y 5 millones de euros y el Palau estaba económicamente bien", aseguraba.
Sin embargo, el expresidente del Palau ponía de relieve que "cuando yo decía 'quiero hacer tal cosa o tal otra' todo el mundo me decía que sí", pero también subraya que "movió cielo y tierra" para conseguir financiación. Según las grabaciones, el exdirector administrativo del Palau, Jordi Montull, habría llevado todo el control de las obras que se hicieron en la institución y él y su hija Gemma conocían a la perfección todo el entramado financiero.
Millones de datos
Según Millet, Montull "puede aportar mejores datos porque lo tiene todo apuntado" y, en este preciso momento, asume: "Me equivoqué". Con la entrega de las grabaciones, el expresidente del Palau pretendía que se analice el trabajo que ha hecho y "se saquen conclusiones".
Su relato explica que "me vienen a mi despacho con un trozo de viga podrida y me dicen que el Palau está cayendo y que con un pequeño terremoto eso se va abajo. Yo tenía una comida con el conseller Max Cahner y le llevé la viga envuelta con papel de diario y le dije: 'Max, el Palau está así'". Fue entonces cuando empezó a mover cielo y tierra para intentar rehacer el Palau" y, confesa, "todo el mundo me aconsejaba que quedara como un museo, que hiciera un concierto para Sant Esteve con el Orfeó y tres conciertos más y suficiente. A mí esta idea me repugnaba", sentenciaba.