El ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, se ha mostrado indignado después de que dos activistas ecologistas se hayan enganchado este sábado a los marcos de los cuadros de 'La maja desnuda' y 'La maja vestida' de Francisco de Goya al Museo Nacional del Prado en Madrid. "Mi rechazo más absoluto a un acto vandálico que produce un repudio generalizado", ha afirmado el socialista en un tuit. Además, Iceta ha asegurado que "no hay causa de que justifique atentar contra el patrimonio de todos". El ministro también ha adjuntado un comunicado del museo, donde se informa que las dos obras han sido inspeccionadas y que no han sufrido ningún daño. Los marcos, en cambio, sí que han sufrido algún desperfecto, en particular el de 'La maja desnuda', detalla el escrito.
Mi más absoluto rechazo a un acto vandálico que produce un repudio generalizado. No hay causa que justifique atentar contra el patrimonio de todos pic.twitter.com/lHphORQ6Dj
— Miquel Iceta Llorens /❤️ (@miqueliceta) November 5, 2022
El Museo del Prado ya ha reabierto la sala
A pesar de los daños, el Museo Nacional del Prado ha reabierto este sábado por la tarde la sala donde se encuentran expuestas las dos obras de Goya, después de solucionar los desperfectos causados por los dos jóvenes activistas de Futuro Vegetal, los cuales se han enganchado las manos a los marcos de los cuadros. En medio de las dos piezas de arte, también han escrito un mensaje con '+1,5º' para "alertar sobre la subida de la temperatura mundial que provocará un clima inestable y graves consecuencias en todo el planeta", han explicado desde la organización ecologista. Los activistas han podido ser desalojados "sin problemas" y han sido detenidos por la Policía. Hacia las 17.00 horas, el perfil oficial del Museo del Prado ha compartido un mensaje en Twitter, explicando que "la sala de las majas vuelve a estar abierta al público".
La sala de las majas vuelve a estar abierta al público pic.twitter.com/XAfxZzMI6J
— Museo del Prado (@museodelprado) November 5, 2022
Después de la acción, el museo ha movilizado a un pintor para retirar la pintada de la pared, así como una brigada encargada de colocar las obras, según han informado fuentes gubernamentales en Europa Press. El pegamento y la pintura de espray utilizadas para hacer la protesta eran de plástico, cosa que ha permitido a los activistas pasar el control de entrada y el detector de metales. El Museo del Prado ha condenado la acción de Futuro Vegetal y ha rechazado "poner en peligro el patrimonio cultural como medio de protesta". De hecho, esta acción hecha en el Museo Nacional del Prado no es un caso aislado, sinó que se suma a otras protestas hechas en museos de todo el mundo en las últimas semanas. El pasado 14 de octubre, dos ecologistas del movimiento 'Just Stop Oil' lanzaron sopa de tomate en 'Los Girasoles' de Van Gogh, expuesto a la National Gallery de Londres, mientras que el 23 de octubre otros activistas del grupo 'Última Generación' tiraron puré de patata sobre un cuadro de Claude Monet, en el Museo Barberini de Potsdam.