Este 4 y 5 de junio, Barcelona acoge la feria UNVEX 2024, uno de los encuentros internacionales del mundo del dron, que ha contado, este martes, con una inauguración con la participación del director general de la Policía, Pere Ferrer, que ha explicado la apuesta que hacen los Mossos d'Esquadra, la policía de Cataluña, con el control del espacio aéreo en una fase más del despliegue por tierra, mar y ciberespacio. Ferrer ha apostado, junto con el jefe del cuerpo, el comisario Eduard Sallent, y varios mandos, por una tecnificación del cuerpo haciendo un esfuerzo presupuestario para dotar a varias unidades especializadas de aeronaves no tripuladas para mejorar la capacidad de reacción e investigación. La joya de la corona es un dron de ala fija que permite horas de patrullaje, también sobre el mar, y con mucha capacidad para luchar, entre otras cosas, contra el narcotráfico. El director general de la Policía ha anunciado en la inauguración de esta feria, puntera del sector, que los Mossos han licitado dos drones más de ala fija que se sumarán a la flota de la fuerza aérea de los Mossos d'Esquadra.
Apuesta de los Mossos por los drones policiales
La automatización de los vehículos, en el sector policial, en el aire, como los drones, pero también con los aparatos no tripulados submarinos y terrestres, ha explicado Ferrer, está permitiendo una inspección y mantenimiento más seguros y eficientes de infraestructuras críticas como puentes, redes eléctricas y parques eólicos, y esto no solo mejora la seguridad de los trabajadores, sino que también reduce los costos y el tiempo de parada de las operaciones. Como gestor de fondos públicos, Ferrer también ha puesto sobre la mesa, durante la inauguración de la feria, que este tipo de medios están generando nuevas oportunidades de negocio y mercados emergentes, como la misma feria, y permiten también reducir costos. El patrullaje que pueden hacer con drones, si se tuviera que hacer con otros medios, sería mucho más caro.
"Los vehículos no tripulados son sinónimo de eficiencia", ha celebrado Ferrer. Su capacidad para operar en entornos hostiles o difíciles de acceder los convierte en herramientas muy relevantes para misiones de búsqueda y rescate, vigilancia ambiental y respuesta a emergencias, ha defendido ante varios representantes del sector. "Su autonomía y precisión mejoran significativamente la capacidad de respuesta y la toma de decisiones en situaciones críticas, salvando vidas y recursos", ha apuntado. La apuesta de los Mossos d'Esquadra por este tipo de medios aéreos, ha defendido Ferrer, es para mejorar la seguridad de espacios críticos y también mejorar el patrullaje para luchar contra delitos como el narcotráfico, uno de los problemas que más tienen en alerta a la policía catalana, si bien el director general también ha celebrado la relación con la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) y también con el tejido económico e industrial catalán y con sedes en nuestro país con capacidad de innovación como Seat, Endesa o Airbus de manera coordinada con diferentes proveedores como Dedrone con su sistema Kuppel, Indra con su colaboración con el MWC, DJI con sus múltiples productos o Quantum Technologies con la aportación de la primera ala fija a una policía del sur de Europa, la de los Mossos d'Esquadra.
Dos nuevos drones de ala fija y un UGV para el GEI
Durante la presentación de esta feria del sector del dron, el director general también ha explicado que los Mossos han iniciado la licitación de dos drones de ala fija más, después de confirmar que la incorporación del primero, que entró en servicio a primeros de marzo, y que ya patrulla la costa catalana, contra el narcotráfico, y también se ha desplegado para vigilar las vías ferroviarias, para luchar contra el robo de cobre, y durante este verano se utilizará para saturar la AP-7 para detectar ladrones. Ferrer también ha anunciado que se ha hecho la licitación de un vehículo terrestre táctico no tripulado, estilo UGV, para el Grup Especial d'Intervenció (GEI) de los Mossos y un dron con capacidad de hacer explosiones, por operaciones en las que los operadores del grupo especial necesitan actuar contra objetivos armados con posibles rehenes. Estas inversiones superarán los 535.000 euros, que se suman a los 250.000 del primer dron de ala fija, y a los 162.000 euros invertidos en la compra de 24 drones de diferentes tamaños y capacidades para reforzar la Unidad de Drones del Área Aérea e iniciar el despliegue territorial.
