La matanza terrorista del 7 de octubre de 2023 por parte de Hamás contra civiles israelíes y la escalada bélica en el Oriente Medio pusieron en máxima alerta a todas las agencias de seguridad internacionales, incluidos los Mossos d'Esquadra, que fueron de los primeros cuerpos policiales en reforzar, esa misma mañana, la vigilancia en espacios con presencia judía, como sinagogas o intereses de Israel en Cataluña. A esta nueva fase de la guerra contra el terrorismo de Hamás se suma también la acción del Movimiento Global Yihadista, que, aunque en horas bajas, mantiene la amenaza viva, con los ataques de personas inestables o lobos solitarios como principal riesgo para nuestro país. En los últimos meses se han registrado incidentes relacionados con el terrorismo en Cataluña, como el ataque con un martillo de un hombre paquistaní detenido en Badalona el Viernes Santo, así como detenciones de personas relacionadas con el terrorismo yihadista y global. En Barcelona, la Guardia Civil detuvo recientemente a tres personas acusadas de vender componentes tecnológicos a Hezbollah, en el Líbano, para fabricar drones destinados a atacar Israel.
Este lunes se ha celebrado la 74ª edición del Gabinete de Coordinación Antiterrorista, presidido por la consejera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, y con la participación del director general de la Policía, Josep Lluís Trapero, así como del comisario Miquel Esquius, la comisaria Alicia Moriana, y otros altos cargos policiales. Este encuentro sirve para hacer seguimiento de la actual situación de riesgo y amenaza en Cataluña, y para analizar las medidas de seguridad aplicadas por la anterior Prefectura, como el refuerzo del control en zonas concretas con más registros e identificaciones para prevenir ataques con armas blancas en lugares de interés especial como la Sagrada Familia, el Estadio Olímpico, en Montjuïc, la estación de Sants, el aeropuerto del Prat, comisarías y sinagogas. De la reunión ha trascendido que el departamento de Interior ha ordenado continuar incrementando la protección en espacios de grandes concentraciones de personas, infraestructuras críticas, medios de transporte, sedes diplomáticas y edificios vinculados con países involucrados en la escalada bélica en Oriente Medio, como Israel y la comunidad judía, Estados Unidos y otros estados aliados, destacando que el riesgo se mantiene elevado.
Como en ediciones anteriores de este gabinete, los especialistas han subrayado que, en el contexto actual de terrorismo global, los cuerpos policiales son un objetivo prioritario para terroristas, sean organizados o lobos solitarios, y han recomendado aumentar el dispositivo Rectángulo -protección, vigilancia exterior y prevención en las comisarías de toda Cataluña-, de autoprotección para las comisarías, así como reforzar la seguridad en intervenciones y vigilancias por parte de los Mossos d'Esquadra, las policías locales y otros operadores de seguridad. Los cuerpos policiales, en toda Europa, se han convertido en objetivo de los terroristas, que ven una forma fácil de generar terror atacando directamente a los policías y comisarías, por la repercusión que generan.
Vigilancia digital para evitar radicalizaciones fatales
Durante la reunión también se han planteado otros riesgos terroristas en nuestro país, si bien de capacidad mucho más limitada, aunque políticamente interesa que también tengan repercusión, como el supremacismo blanco, un tipo de terrorismo que en Cataluña tiene capacidad limitada y no ha causado heridos o víctimas mortales, a diferencia del terrorismo yihadista. La consejera Parlon ha instado a los jefes de la policía catalana a intensificar el ciberpatrullaje para detectar y neutralizar la propaganda terrorista en internet, sobre todo entre los más jóvenes. La autoradicalización, ahora principalmente en el entorno digital y no en las mezquitas como antes, es uno de los elementos que actualmente preocupan más a los analistas de inteligencia y antiterrorismo de la Comisaría General de Información de los Mossos.
Según datos de los Mossos, durante los últimos doce meses se han identificado casi 59.000 personas y 13.000 vehículos en el marco del Plan Operativo Específico (POE) Antiterrorista en zonas consideradas estratégicas, como la Sagrada Familia, las comisarías de policía, las sinagogas y los estadios de fútbol, espacios con grandes concentraciones de personas. Se ha destinado un 206% más de horas a este POE en comparación con el mismo periodo del año anterior. El departamento de Interior ha confirmado durante la reunión un presupuesto extraordinario para la compra de material balístico para las unidades de intervención, para hacer frente a incidentes críticos, tal como avanzó en abril pasado ElNacional.cat.