Los okupas atrincherados en el tejado de la Ruïna han caído poco después de los del terrado del Kubo. Las dos casas okupas de la Bonanova de Barcelona han logrado quedar controladas hacia las nueve y cuarto y ser desalojadas, completamente, alrededor de las once, por un gran dispositivo de los Mossos d'Esquadra que se ha iniciado hoy, jueves, hacia las cinco y media de la mañana. Los okupas han mantenido resistencia con violencia y lanzamiento de objetos hasta exactamente las nueve y media, cuando el desalojo en la práctica ha quedado finalizado. Durante la entrada de la policía en los edificios, los han golpeado con todos los objetos que han podido, lanzando líquido inflamable, sacos de escombros, petardos, botes de humo, botellas y otros objetos contundentes. Finalmente, sin embargo, los dos últimos que quedaban en el tejado de la Ruina han salido y lo que había colgado con una cuerda en la fachada del Kubo también ha acabado en la calle, después de las maniobras hechas por los Bomberos de Barcelona con una grúa. En total, se han detenido a siete personas.
🔴 EN DIRECTO: Desalojo okupa del Kubo y la Ruina en la Bonanova de Barcelona
Pese a las dificultades, si además se le añade la manifestación prookupa convocada esta mañana hacia las cinco y media, justo cuando empezaba el desalojo, los Mossos d'Esquadra han conseguido disolver la protesta y acceder poco a poco a los dos edificios de la Bonanova. Los okupas se han atrincherado, pero con la previsión de la respuesta violenta que mostrarían, se ha cortado la electricidad a toda la zona y el Grupo d'Eines de la policía catalana ha utilizado una jaula para ir abriéndose paso hacia el interior de los edificios y colocar vallas perimetrales para poder acceder. Y así ha sido. Hacia las nueve de la mañana los primeros agentes controlaban la terraza del Kubo y después de y media llegaban al tejado de la Ruïna. Quedaban unas tres personas en este último edificio, además del de la fachada del Kubo, pero una hora y media más tarde la policía catalana había logrado echarlos. En total se han realizado siete detenciones, seis hombres y una mujer, según han explicado fuentes policials a ElNacional.cat.
El gran dispositivo del desalojo que ha durado más de cuatro horas
Los dos edificios han conseguido ser desalojados después de muchas disputas y disturbios recurrentes. Los destrozos estructurales y materiales son gigantescos, dado que los okupas, desde de buena mañana, ya han dado por perdidos los dos inmuebles de la Bonanova. Las tres personas que había en el tejado de la Ruïna han sido desalojadas y en el Kubo, hacia las once han conseguido bajar a la persona colgada de una cuerda que estaba allí desde las siete de la mañana, la Unidad de Montaña es la que ha hecho las primeras gestiones para intentar bajarla de allí. Una vez la resistencia okupa de los dos edificios ha caído y los Mossos d'Esquadra han dado por controlados los inmuebles, el desalojo ha durado una hora más, hasta que los que había en la tejado de la Ruina han salido y los Bomberos de Barcelona han conseguido descolgar con una grúa al individuo de la fachada del Kubo.
El gran dispositivo desplegado, con una amplia presencia de la Brigada Móvil (Brimo) y el ARRO, se ha completado con unidades especializadas del cuerpo como la Unidad Canina, la Unidad de Montaña, la Unidad de Drones, la Unidad de Subsuelo y TEDAX. Además, el Grupo de Herramientas se ha vuelto imprescindible por la cantidad de trampas y violencia que han presentado los okupas. La paciencia y yendo poco a poco ha sido la mejor estrategia de la policía catalana con el fin de controlar las dos casas y evitar enfrentamientos directos que pudieran haber dejado heridos, hasta que se ha conseguido el desalojo total a media mañana.
Este gran dispositivo policial en la Bonanova, además de los avisos a los comerciantes, la manifestación okupa de las cinco y media de la mañana que se ha disuelto y los avisos de la escuela La Salle Bonanova, ha creado una gran expectación en el barrio. Un centenar de personas se han congregado viendo el desalojo en directo. Un silencio y unos murmullos que se oían mientras los Mossos d'Esquadra estaban dentro, evitando las trampas y la respuesta violenta de los okupas, mientras negociaban con los últimos okupas. Finalmente, los incidentes han sido mínimos, a pesar de la tensión vivida en el barrio desde de buena mañana, con protestas, lanzamiento de objetos y otras acciones violentas hacia los agentes. Los ciudadanos reunidos en la plaza de la Bonanova, cuando han empezado a sacar a las primeras personas del terrado han iniciado un sonoro aplauso colectivo. Los Mossos han desalojado el Kubo y la Ruïna y han dado por acabado el operativo en torno a las once y cuarto de la mañana con un total de siete detenidos.
El conseller Elena llega a la Bonanova
El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, se ha desplazado hasta las dos casas okupadas de la Bonanova después de que el desalojo haya concluido con el control del Kubo y la Ruïna. También se han desplazado hasta allí el director general de la Policía, Pere Ferrer, y el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Eduard Sallent. Han saludado y felicitado los diferentes agentes que han integrado los dispositivos en el exterior de los edificios. Ya han adelantado, sin embargo, que no harán declaraciones a los medios de comunicación sobre la actuación policial de esta mañana y el posterior desalojo de los okupas.