Los Mossos investigan al futbolista Dani Alves por haber agredido, presuntamente, a una mujer en la discoteca Sutton de Barcelona. Los hechos se habrían producido, según relató la mujer a la policía, la madrugada del viernes, 30 de diciembre, en el interior de la discoteca. Concretamente, denunció delante de los Mossos haber sido víctima de tocamientos por parte del exjugador del F.C. Barcelona, de 39 años. Tal como ha publicado el diario ABC, la mujer ha explicado que Alves le habría introducido la mano dentro de la ropa interior y, asustada, avisó a las amigas que la acompañaban de fiesta, que se encargaron de advertir a la seguridad del local lo que acababa de suceder. Entonces, se activó el protocolo del Ayuntamiento de Barcelona contra las agresiones y el acoso sexual en espacios de ocio nocturno privados, como sería el caso de esta discoteca. Este mismo medio informa que la mujer estaba muy nerviosa cuando comunicó los hechos delante de los Mossos y en ningún momento se quedó sola. Sus amigas estuvieron con ella en otro lugar de la discoteca mientras esperaban a la policía, que llegó después de que los responsables del local los avisaran.
Desde el entorno de Dani Alves niegan rotundamente esta agresión que ya está siendo investigada. De hecho, el futbolista ya se había ido cuando la víctima denunció los hechos, pero reconocen que el lateral estuvo en la discoteca aquella noche. La víctima ha pasado un reconocimiento médico en un hospital de Barcelona y los Mossos ya le han tomado declaración, aunque todavía no ha formalizado ninguno denuncia.
El protocolo del Ayuntamiento de Barcelona
La discoteca Sutton aplicó el protocolo iniciado por el Ayuntamiento de Barcelona en 2018 que se aplica en los locales de ocio nocturno. Tal como queda recogido en este documento, que se puede consultar aquí, en casos como este se tiene que dar atención prioritaria a la persona agredida, por delante de la persecución del delito o del agresor. Eso implica asegurarse de que la víctima reciba la atención adecuada, y, en casos de violaciones o abusos graves, "que esta misma persona no se quede sola en ningún momento si no es que ella lo pida". Tal como ha trascendido, la chica estuvo acompañada en todo momento de sus amigas. El ayuntamiento, entre otras pautas, también recuerda que es importante respetar las decisiones de las personas agredidas y asegurar que reciba la información necesaria y el asesoramiento correcto, ya que es quien tiene que tomar la última decisión, "incluso cuando parezca incomprensible".