El major Trapero ya tiene nuevo destino. El lunes 7 de febrero se presentó en el lugar donde finalmente lo han colocado después de estar una semana en un despacho provisional en la comisaría del Eixample sin ninguna tarea a hacer y después de estar casi un mes de asuntos propios después de ser destituido de jefe del cuerpo el pasado 20 de diciembre. Este pasado lunes asumía la dirección de la Divisió d’Avaluació de Serveis (DAS) y estrenaba despacho en la última planta de la comisaría de las Corts. Esta macrocomisaría de Travesía de las Corts acoge la comisaría del distrito, pero también los calabozos de toda Barcelona y las oficinas de la Dirección General de la Policía (DGP). Josep Lluís Trapero está desde el lunes bajo las órdenes de Pere Ferrer, el director general de la Policía, y será el encargado de evaluar a los otros Mossos d'Esquadra. Aunque el exjefe del cuerpo no tendrá ninguna responsabilidad ni mando operativo sobre los agentes ni dependerá de la nueva Prefectura de Estela y Sallent, sí que tendrá "poder en diferido", es decir, podrá evaluar operativos, redactar protocolos y puntuar el trabajo de sus compañeros.
Sus resoluciones serán presentadas a Pere Ferrer y al comisario jefe, Josep Maria Estela. Serán ellos los que decidirán si los cambios que propone Trapero y el equipo de 20 agentes que ahora liderará se pueden aplicar a toda la estructura policial. La relación entre Trapero y Ferrer y la Prefectura no llega ni a poder calificarse de "fría".
¿Qué es la Divisió d’Avaluació de Serveis (DAS)?
Fuera de la estructura de la Prefectura, los Mossos d'Esquadra tienen varias unidades y divisiones, entre otros, la que lidera desde hace una semana el major Trapero, Divisió d’Avaluació de Serveis (DAS). Es la división que se encarga de evaluar los servicios de los Mossos d'Esquadra: analizar operativos, protocolos y rendimientos de la policía. La DAS trabaja de manera paralela al trabajo que hace la División de Asuntos Internos (DAI), que también analiza los servicios, pero siempre que se haya detectado cualquier tipo de conducta negligente por parte de los policías.
Fuera de la estructura de la Prefectura, y bajo el mando directo del director general, también está la División de Escoltas -la fusión entre el Área de Escoltas y el Área de Seguretat Institucional- y la Comisaría General de Relaciones Institucionales, Prevención y Mediación (CGRIP).
¿Qué trabajo tendrá que hacer ahora el major Trapero?
Uno de los trabajos más importantes que ha hecho hasta ahora la DAS y que tendrá que seguir haciendo, o haciendo hacer, el major Trapero es la elaboración de protocolos de trabajo: los conocidos PNT, Protocolos Normalizados de Trabajo. Pautas de servicio que los agentes del cuerpo de Mossos d'Esquadra, de manera normalizada, tienen que hacer en los servicios de su día a día. La DAS es la encargada de redactar, evaluar y mejorar los protocolos policiales, por ejemplo, sobre el trasladado de detenidos, sobre cómo trabajar en el hallazgo de cadáveres o en la comunicación, por ejemplo, de accidentes de tráfico. No hay mucho margen de actuación y la policía tiene un protocolo por casi cada caso que se encuentran en la calle. Y si aparecen nuevos, hará falta que la DAS elabore un nuevo PNT. Estos protocolos, si se aprueban, entran en vigor cuando los firma el jefe de la DAS, el jefe de la Prefectura y el jefe de la Comisaría General que implica.
Más allá de los protocolos, la división de Trapero también es la encargada de evaluar las encuestas de Seguridad Pública y evaluar los agentes con el conocido como PGA07, que sirve para hacer una auditoría continuada de evaluación del servicio policial a todos los servicios de los Mossos d'Esquadra. La DAS se encarga también de analizar los resultados de esta evaluación anual de los Mossos d'Esquadra que tiene en cuenta, entre otras cosas, procedimientos y tareas organizativas.
Josep Lluís Trapero, uniformado, en una imagen de archivo en la sede de Interior / Foto: Sergi Alcàzar
La Divisió d’Avaluació de Serveis (DAS) también se encarga de dar a la Dirección General de la Policía las respuestas técnicas a las preguntas que puedan hacer los grupos del Parlament y también se encarga dar respuesta a las preguntas y quejas que puedan hacer los ciudadanos sobre los Mossos d'Esquadra con el modelo VAR34. Trapero será el encargado de saber si el tiempo de espera de la comisaría de Sarrià, dónde una víctima de 82 años de un robo con violencia, tuvo que esperar 3 horas a ser atendida, si es correcto o no, y si se adecua a la Carta de Servicios de los Mossos d'Esquadra, por ejemplo.
"Poder diferido" y "aislado"
Fuentes de los Mossos d'Esquadra han asegurado que si bien esta no era la posición inicial que estaba prevista que pudiera asumir el major Trapero después de ser desterrado de la Prefectura, han buscado un lugar donde pueda seguir teniendo responsabilidad, todo y que fuera de la escala de mando y con pocos agentes a cargo, y dónde su poder queda "aislado y controlado".
Interior y la Dirección General de la Policía habían ofrecido una posición de analista de riesgo, dónde pudiera aportar su visión sobre temas concretos, pero finalmente el departamento aceptó darle más responsabilidad y que pudiera asumir la Divisió d’Avaluació de Serveis (DAS). Desde la actual dirección policial aseguran que si bien tendrá encargos concretos y tareas encomendadas, el poder de Trapero estará "diferido" y no tendrá ninguna responsabilidad operativa y todas las medidas que pueda adoptar tendrán que pasar antes por la Prefectura antes de poder aplicarse.
De paisano, con escolta y coche oficial
Si bien el día que se presentó en la comisaría del Eixample lo hizo de uniforme operativo, en las Corts el major Trapero trabaja de paisano. ElNacional.cat lo ha podido observar fumando en la última planta de la comisaría, acompañado de personas de su confianza, que mantiene en su equipo. El major Trapero, de momento, mantendrá el coche oficial con chófer y escoltas, un hecho que solamente dispone, en la Prefectura, el comisario jefe. Fuentes de la policía catalana aseguran que el major mantuvo la seguridad personal y el coche oficial, en un núcleo de seguridad muy próximo a él, también durante los meses que estuvo preparando su defensa en la Audiencia Nacional después de ser purgado por el artículo 155 de la Constitución Española.
Trapero y Albert Batlle, el año 2017, en el Palau de la Generalitat de Catalunya / Foto: Sergi Alcàzar
Trapero asume la dirección de la División, un cargo que antiguamente había ostentado un intendente, pero lo seguirá haciendo con el rango de major. El año 2017, con Albert Batlle, amigo personal de Trapero, de director general de la Policía, fue ascendido a major, en una operación para entronizarlo como jefe del cuerpo, intentando crear una figura que pudiera sobrevivir a los cambios políticos en Interior.
Foto principal: Trapero, fumando, en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de las Corts / Sergi Alcàzar