Este verano será convulso en Catalunya. Los Mossos no lo ocultan y aceptan que los retos de seguridad que vivirá nuestro país durante los próximos meses necesitan un refuerzo especial. Con la multirreincidencia desbocada, los crímenes disparados -los datos publicados hoy por ElCaso.cat lo confirman-, un incremento de incidentes con armas de fuego relacionados con el narcotráfico, peleas en fiestas mayores y llegadas de turismo de récord este 2024, los Mossos han tenido que diseñar un plan especial de seguridad para poder controlar el territorio. Es el objetivo del Plan Integral de Seguridad para este verano que hoy, con el máximo mando del cuerpo, el comisario en jefe Eduard Sallent, y el comisario David Boneta, responsable de la Comisaría Superior Territorial, han presentado en una rueda de prensa desde Barcelona. Ahora el plan se tendrá que explicar a todos los agentes y ponerlo en marcha tan pronto como se pueda. No estaba prevista esta rueda de prensa que se ha hecho hoy, pero los incidentes de los últimos días en Catalunya, sobre todo el tiroteo de Sant Joan, en Girona, y las consecuencias que se han derivado, con el asalto de Figueres, donde los Mossos decidieron mirar hacia otro lado, lo han hecho casi obligada.

La situación en Catalunya es complicada y la crispación se ha disparado, aceptan ahora ya públicamente los Mossos d'Esquadra -antes lo hacían solo a puerta cerrada- y se ha diseñado un plan que debe servir para ganar capacidad operativa para responder a incidentes críticos con más efectivos en las zonas más conflictivas de Catalunya. Además de la delincuencia común, los Mossos también han recordado que nuestro país, como el resto de Europa, sigue con un nivel de 4 sobre 5 de amenaza terrorista. Los analistas de Información, la comisaría general de la policía catalana que lucha contra el terrorismo, lo han elevado a 4 reforzado y se mantiene el control y vigilancia de elementos radicalizados en casa para poder hacer frente a una posible amenaza yihadista de manera preventiva. Este verano hará siete años de los sanguinarios atentados de la Rambla de Barcelona y del paseo marítimo de Cambrils.

Datos turísticos de récord, reto de seguridad

Las informaciones con las que trabajan los Mossos son que estos meses de más calor llegarán a Catalunya cifras récords de turistas, unos datos que ya se han confirmado durante los primeros meses de 2024, con llegadas también de récord en el aeropuerto del Prat. Este incremento histórico de los visitantes extranjeros implica un reto de seguridad importante. Los Mossos desplegarán dispositivos específicos de seguridad, especialmente en zonas costeras, de interior y de montaña, para evitar hurtos, robos y asaltos a los turistas. Se incrementará el patrullaje, de paisano y con uniforme, en zonas clave para prevenir y poder actuar con más celeridad si se cometen robos.

Habrá más presencia de equipos de orden público en puntos clave y también se ha incrementado, aseguran los Mossos, la capacidad de respuesta de las salas de coordinación, con más efectivos y reabriendo salas como la de Girona, que se habían cerrado antiguamente para centralizar todo en una macrosala en el edificio del 112 de Reus, que no ha funcionado. El movimiento de los turistas también se hace por carreteras, y es aquí donde la División de Tráfico también incrementará su presencia y patrullaje en dos líneas, prevención de la siniestralidad y, al mismo tiempo, también lucha contra los robos que se sufren en vías de transporte, sobre todo, autopistas, cuando los turistas acceden a nuestro país por el norte.

Incidentes en fiestas mayores: más orden público y filtros policiales

También las fiestas mayores, grandes conciertos y festivales necesitan más vigilancia y presencia policial, según los Mossos d'Esquadra. Para este verano se han diseñado dispositivos policiales más robustos, con filtros y controles, sobre todo para evitar que personas ajenas, como ocurrió el año pasado, generen incidentes o desórdenes públicos. El final del verano de 2023 fue muy caliente con las fiestas mayores de Barcelona y otros puntos del área metropolitana, que terminaron con incidentes y ataques directos a la policía. Desde la Prefectura de la Policía se ha autorizado a las regiones policiales a activar horas extraordinarias para activar dispositivos, sobre todo de orden público, del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), y poder responder, como no pudo ser el año pasado, a incidentes en fiestas mayores.

ARRO y Brimo de los Mossos alcanzan los 1.500 efectivos este verano / EP

Los controles preventivos, para identificar personas y hacer filtros de armas blancas, también será uno de los objetivos este verano, han explicado los jefes de los Mossos d'Esquadra. ARRO y Brimo incrementarán los controles de paso y controles de personas destinados a la búsqueda de armas blancas pero también de armas de fuego. Los equipos de orden público, que estarán activos las 24 horas del día, también harán vigilancias estáticas en puntos calientes, para poder reaccionar si se generan incidentes críticos.

Por tierra, mar y aire

Además del despliegue y refuerzo de las unidades de seguridad ciudadana en toda Catalunya, el plan de verano de los Mossos d'Esquadra contempla también incrementar la capacidad operativa por mar y aire. La Policía Aérea desplegará las naves no tripuladas de acuerdo con las necesidades operativas de las diferentes regiones policiales para poder complementar el trabajo de las patrullas de tierra. La Policía Marítima tendrá desplegada por toda la costa catalana diez embarcaciones y ochenta efectivos que compaginan las tareas de seguridad ciudadana con la de inspección y control de la actividad en los puertos del país.

La activación de este plan integral que hoy han presentado los Mossos incorpora recursos extraordinarios a través de un fondo de horas extra para incrementar la capacidad operativa de las comisarías de todo el país. Este año, aseguran, hay un crecimiento de 882 efectivos policiales respecto al verano del 2023. Además, un total de 81 efectivos se destinan a comisarías de Barcelona, Badalona, Mataró, Blanes y Salou-Vila-seca desde el pasado 17 de junio. También se han reforzado las unidades de orden público, ARRO y Brigada Móvil (Brimo), que con la incorporación de agentes en prácticas este verano alcanzan los 1.500 efectivos. También se han incorporado en varios destinos los nuevos subinspectores, sargentos y cabos de la última formación, un hecho, según los jefes policiales, que refuerza también la capacidad de mando. Los agentes en prácticas que salgan de la Escuela de la Policía en agosto también se incorporarán a Barcelona para dar seguridad a la Copa América, uno de los otros retos de seguridad de estos próximos meses en la capital y en todo el país.

Cámaras para grabar incidentes

Este verano, las patrullas de las Unidades de Seguridad Ciudadana y las Áreas Regionales de Recursos Operativos (ARRO) de los Mossos d'Esquadra incorporan nuevos Dispositivos Personales de Grabación (DGP), con tecnología avanzada, que sustituirán los actuales. Esta iniciativa, con una inversión de 1 millón de euros, ha permitido la adquisición de 800 dispositivos distribuidos en todo el territorio, con 300 más previstos próximamente. Estos DGP permiten grabar actuaciones policiales y retransmitir las imágenes en directo a las Salas de Mando y Centros de Coordinación, contribuyendo a la seguridad jurídica de los agentes y a la calidad de las imágenes con trazabilidad por geolocalización y almacenamiento en la nube.