Ha fallecido el conocido diseñador de moda Francisco Rabaneda Cuervo, conocido popularmente como Paco Rabanne (Guipúzcoa, 1934) a la edad de 88 años. Así lo ha confirmado el alcalde de Vannes (Bretaña francesa) al diario Le Telégramme.
Rabanne ha perdido la vida en su residencia de Portstall (Finisterre), un pueblo situado en la costa del noreste de Francia. Rabanne se trasladó allí en febrero de 1939 con su familia. Por su grandísimo talento, Rabanne pudo ver cómo su legado se valoraba mientras aún conservaba su vida. Su obra se considera primordial para entender la moda contemporánea. Además, en la actualidad, su marca pasa por un gran momento.
Su padre fue general de las tropas republicanas y fue fusilado durante la Guerra Civil. Por eso cuando tenía 5 años tuvo que exiliarse con su familia a Francia. Allí estudió arquitectura y diseño de moda. La vocación por la ropa de diseño la heredó de su madre, que fue costurera jefa de la reconocida firma Balenciaga.
Rabanne gozó de un gran prestigio internacional gracias a su destreza como diseñador de moda. Pero no solo fue una figura destacada en ese ámbito, sino que también lo fue en el campo de la perfumería.
Rabanne, un icono de la moda
Durante su inicio como diseñador, confeccionó accesorios para modistos como Givenchy, Balenciaga o Dior. Y presentó su primera colección en 1966. Desde entonces, su carrera profesional tomó una trayectoria ascendente hasta llegar a crear su propia marca de alta costura.
Rabanne también dejó huella en el mundo del cine. Y es que se ocupó de la estética de algunas de las películas más emblemáticas de la historia, entre ellas Barbarella, con Jane Fonda. Sin duda, Paco Rabanne es uno de los mayores diseñadores de moda. Fue galardonado con La Legión de Honor francés, La Medalla de Oro bellas artes en España y el Premio Nacional de Moda en 2010.
Finalmente, la compañía de moda y belleza Puig ha destacado que Rabanne tuvo un papel muy importante en muchos de los logros de la empresa, con fragancias como Paco Rabanne pour Homme y 1 Million. Concretamente, la colaboración entre ambos empezó a finales de los años 60 cuando Antonio y Mariano Puig (segunda generación de la empresa) cerraron un acuerdo con él en París. "Rabanne seguirá siendo una importante fuente de inspiración para los equipos de moda y fragancias" de la firma, ha afirmado el presidente ejecutivo de Puig, Marc Puig.