Cuatro personas han muerto por causas atribuibles a la ola de calor en Catalunya desde el domingo, según información de la estadística de Monitorización de la mortalidad diaria por exceso de temperatura del Instituto de Salud Carles III (ISCIII). Esta recoge dos muertes atribuibles a la temperatura este viernes, una jueves y una domingo pasado. En el conjunto del estado se contabilizan 360 muertos atribuibles a la temperatura desde el 10 de julio. Aquel día hubo 15 defunciones, que subieron a 28 lunes, 41 martes, 60 miércoles, 93 jueves y el pico se dio este viernes con 123 defunciones en un solo día atribuibles a la temperatura. Del total de víctimas en Catalunya, la estadística recoge que una era mayor de 85 años.
Alerta por la ola
El Ayuntamiento de Barcelona ha activado el plan de actuación por ola de calor en fase de alerta. Eso implica la activación de operativos específicos para atender especialmente a los colectivos más vulnerables mientras la temperatura no remita de nuevo por debajo del umbral de alerta. Por una parte, profesionales coordinados por el Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB) y apoyados por voluntarios de la Cruz Roja saldrán a la calle en las franjas de más calor para repartir agua a las personas sin techo e informarlas de los espacios climatizados. Por otra parte, se intensificarán los servicios de Teleasistencia y Servicio de Atención Domiciliaria para realizar tareas de un seguimiento y control sistemático de las personas consideradas frágiles.
En aquellos casos en que se considera conveniente, se activan medidas para evitar que las personas con mayor riesgo salgan a la calle en las horas del día de más calor, a través de la concesión puntual de comidas a domicilio, la entrega de ventiladores o la atención personalizada a domicilio. Por otra parte, se activan medidas de permanencia o prolongación de las actividades en los centros climatizados como hogares de ancianos, centros de día para personas mayores, y para personas discapacitadas.
Por otra parte el Ayuntamiento de Girona ha prohibido acceder a cualquier zona boscosa del término municipal (tanto a pie como en coche), hacer barbacoas en toda la ciudad y ha abierto tres refugios climáticos y las duchas de la piscina de Santa Eugènia y el pabellón de Fontajau a raíz de la ola de calor. La alcaldesa, Marta Madrenas, decretó este viernes la activación del Plan de protección civil en fase de alerta, por el episodio de elevadas temperaturas y el alto riesgo de incendio forestal (que se prevé que dure hasta entrada la próxima semana). Entre otros, habrá vigilancia especial en el acceso al macizo de las Gavarres, que se reforzará con la presencia de agentes de la Policía Municipal y también voluntarios de Protección Civil.