Este jueves por la mañana se ha conocido que una mujer ha sido ingresada en el Hospital Universitario de Donostia por un caso de fiebre hemorrágica con síntomas compatibles con el Ébola. La paciente, que había viajado a la República Centroafricana, estaba "estable" y en aislamiento en la Unidad de Alta Seguridad Biológica, destinada a pacientes con enfermedades infecciosas graves, mientras esperaba las pruebas para confirmar si se trataba de una infencción por el virus de Ébola. Finalmente, el subdirector médico de la OSI Donostialdea de Osakidetza, Xabier Zubeldia, ha afirmado que la paciente sufre una "infección tropical", pero que considera "improbable" que se trate del virus de Ébola o de Marburgo. Zubeldia ha confirmado que la mujer no está grave y que no temen por su vida.
Según ha informado la consejería vasca de Salud que preside Gotzone Sagardui a través de un comunicado, el equipo de profesionales había puesto en marcha el dispositivo y protocolo "en menos de 24 horas" con el objetivo "de ofrecer la mejor atención" y garantizar su "aislamiento y seguridad". La mujer había llegado al hospital de madrugada. El Hospital de Donostia es uno de los siete hospitales españoles que disponen de una unidad con recursos especiales de alta seguridad y aislamiento para tratar este tipo de enfermedades.
¿Qué es el ébola y cómo se transmite?
El virus se transmite por contacto directo con la sangre u otros fluidos corporales (heces, orina, saliva, semen) de personas vivas o muertas infectadas. Además, la transmisión a los humanos también puede producirse por el contacto con animales vivos o muertes infectadas. Los animales considerados reservorio del virus (huésped que lo aloja y que actúa como fuente de infección para otros animales) son los primates (monas, chimpancés, orangutanes), los antílopes y los murciélagos. Sin embargo, la transmisión de persona a persona se considera el principal mecanismo de transmisión, siendo el riesgo mayor en la fase final de la enfermedad.
El período de incubación puede oscilar entre 2 y 21 días. Las personas pueden contagiar el virus desde el momento en que comienzan a manifestarse los síntomas de la infección. El cuadro se inicia de manera brusca con fiebre, dolor muscular, debilidad, dolor de cabeza y de cuello. Posteriormente, se presentan vómitos, diarrea, alteraciones renales y hepáticas, erupciones cutáneas y hemorragias masivas internas y externas.
No existe tratamiento específico para esta enfermedad. El tratamiento se limita a dar terapia de soporte, según la sintomatología presentada. Existen dos tratamientos aprobados para el virus del ébola de la especie Zaire, pero no se ha evaluado su efectividad por las demás especies del virus como Sudán.