La mayoría con mascarilla pero saltándose las principales normas de seguridad: decenas de personas reunidas y celebrando una fiesta en un hotel sin mantener las distancias. Esta es la imagen que llega de las Canarias de un encuentro improvisado entre voluntarios de la Cruz Roja e inmigrantes llegados a la isla de Gran Canaria.
Desde la organización humanitaria ya han pedido disculpas: "Lamentamos profundamente estos hechos y hemos abierto un expediente para identificar responsabilidades". Las imágenes se han hecho virales a las redes donde, más allá de incumplir las normas marcadas por la Covid-19, también se ha desencadenado una ola de racismo sin precedentes.
En las puertas de un hotel del sur de Gran Canaria y con música de fondo, se puede ver como no respetan las medidas de seguridad. Como mínimo, se pueden identificar dos voluntarias de Cruz Roja que bailan y se abrazan con el resto de personas.
El drama de las Canarias
En paralelo, la llegada de personas por el mar huyendo de la miseria no para de repetirse en este archipiélago. El presidente del gobierno canario, Ángel Víctor Torres, considera que la Unión Europea "ha fallado" en su gestión migratoria derivada de la crisis del coronavirus y advierte que Canarias tiene "límites" y lamenta aquellos que excluyan este territorio de Europa: "Somos acogedores, porque somos y hemos sido migrantes, ahora bien, tenemos unos límites", remarcó el presidente regional.
El próximo 17 de diciembre, el presidente español Pedro Sánchez viaja a Marruecos con el objetivo de coordinar con este gobierno mecanismos de mejor relación entre países vecinos donde el fenómeno migratorio estará sobre la mesa como una prioridad.
La crisis migratoria hace días que es una realidad y se registran nuevas llegadas de pateras o cayucos diariamente, llenas de personas migrantes que cruzan desde diferentes países de África, sobrepasando la capacidad de absorción que tienen las islas y generando situaciones de amontonamiento entre los extranjeros recién llegados. En 2019 llegaron a sus costas un total de 1.497 migrantes, mientras que, a falta de un mes para finalizar 2020, 16.760 personas han desembarcado en sus playas y puertos.