Ha nacido por primera vez en más de un siglo, una cría de lince boreal en Catalunya y abre la puerta a la reintroducción de esta especie que se consideraba extinguida en el estado español. Este nacimiento se ha producido en el centro de recuperación de Fauna MónNatura del Parc Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, gracias a una pareja de lince boreal que llegó el año 2008 en la instalación.
El director del área de Territorio y Medio Ambiente del centro, Miquel Rafa, ha asegurado en declaraciones a RNE, que la función de este nuevo lince, que actualmente pesa ocho kilos, pero que puede llegar hasta los treinta, "será educativa", ya que es "una pieza que faltaba en el ecosistema pirenaico". El biólogo ha insistido en que se trata de un "ejemplar que está en cautividad y que da esperanza para que algún día se pueda plantear un proyecto de reintroducción".
Actualmente, el lince boreal vive en algunas zonas de Europa central, en los países escandinavos, el Cáucaso, Rusia o Mongolia. Asimismo, esta cría podría ser un nuevo comienzo en la cordillera pirenaica, por una especie que fue destruida por la acción humana.
Con todo, según Miquel Rafa, la presencia en los Pirineos de bosques caducifolios, coníferas, pinos negros y abetos, podrían favorecer el desarrollo del lince boreal y su proliferación. Asimismo, como animal carnívoro serviría para controlar la superpoblación de otras especies como los corzos, liebres, ariscos e incluso de zorros, equilibrando un ecosistema que asistió a su desaparición hace años.