El 2023 ha acabado siendo el año más caluroso de la historia, un signo del mal augurio climático que espera en un futuro mucho y muy próximo. Siguiendo el rastro del año que acaba de cerrarse el 2024 empieza con malas noticias sobre la crisis climática. Concretamente, un informe que acaba de publicar el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología Italiano (INGV) alerta que el nivel del mar Mediterráneo está subiendo tres veces más rápido de lo que se había previsto hasta ahora.
La gran diferencia entre los cálculos anteriores y este nuevo informe no recae solo en la mala gestión de la crisis climática, sino en qué no se han tenido en cuenta algunos aspectos como el hundimiento de la tierra. "La subsidencia, es decir, el lento movimiento descendente del suelo a causa de causas naturales o antropogénicas, ejerce un papel crucial en la aceleración de la subida del nivel del mar a lo largo de las costas, desencadenada por el calentamiento global desde 1880," explica Marco Anzidei, investigador del INGV.
El informe muestra que "aproximadamente 38.500 km² de costas mediterráneas (de los cuales aproximadamente 19.000 km² solo en el sector norte de la cuenca) pronto estarán más expuestas al riesgo de inundaciones marinas, con los consiguientes mayores impactos sobre el medio ambiente, actividades humanas e infraestructuras". La investigación remarca que el hundimiento de parte de la costa en Italia, Francia o España acelera la subida del mar. Los investigadores remarcan que ante estos datos hacen falta acciones políticas. "Hace falta tomar medidas concretas para dar apoyo a las poblaciones costeras, que serán cada vez más vulnerables al aumento del nivel del mar y a los riesgos más asociados a él a finales de este siglo y en el futuro", sostienen.
2023, el año más caluroso nunca registrado
Todas las sospechas se confirman. Después de encadenar récords de calor uno tras otro, previsiblemente, se ha confirmado el inevitable: 2023 ya es el año más cálido mesurado a la Tierra desde 1850. La agencia meteorológica de la ONU ha publicado un informe provisional sobre el estado del clima que reitera todos los indicios negativos que se han advertido a lo largo de un año "con fenómenos extremos que han dejado un rastro de devastación y desesperación".
Hasta octubre, la temperatura media de la Tierra se situaba 1,4 grados por encima del periodo preindustrial (1850-1900), ya cerca de los 1,5 grados que se establecieron como límite al Acuerdo de París. Estos 1,4 grados están muy por encima de los excesos de temperatura registrados en los dos años más calurosos hasta ahora, 2016 (cuando se pasó de 1,29 grados) y 2020 (1,27 grados).
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