Ya están en marcha los cambios de la nueva Ley General de Comunicación Audiovisual del Estado. Las cadenas tienen ahora tres meses para aplicar la nueva normativa, que cambia varios aspectos. ¿Qué novedades notarás en la televisión de tu casa?
- Cambios en la publicidad. La nueva ley flexibiliza los límites de la publicidad. Hasta ahora se podían emitir un máximo de 12 minutos de publicidad cada hora y ahora se permitirán emitir 144 minutos desde las seis de la mañana hasta las seis de la tarde que se podrán distribuir como quieran las cadenas. Después, de seis de la tarde en seis de la mañana se pueden hacer 72 minutos más.
- Más protección a los menores. Todos los contenidos que no sean aptos para menores se tendrán que emitir entre las diez de la noche y las seis de la mañana. Además, la nueva ley obliga a todos los prestadores a facilitar información sobre el contenido que puede ser perjudicial a ellos mediante sistemas de calificación por edades.
- Cambios de programación. Los canales ya no tendrán que comunicar la programación tres días antes y la podrán cambiar cuando quieran. De esta manera, se pretende abrir la puerta a contraprogramaciones entre cadenas para obtener mejores audiencias.
- Control de los contenidos. La norma también incluye unos principios generales aplicables a todo el ámbito audiovisual: la dignidad humana; la protección de los usuarios respecto de contenidos que atentan contra la dignidad de la mujer; la obligación de transmitir una imagen respetuosa y apreciativa de las personas con discapacidad; la promoción del pluralismo lingüístico existente en España; y la veracidad de la información.
- La polémica de las lenguas. La ley obliga las cadenas a dedicar el 51% del tiempo de emisión a obras europeas, la mitad en lengua oficial o cooficiales de las comunidades. De esta subcuota, RTVE "reservará un mínimo del 15% a obras audiovisuales en alguna de las lenguas oficiales de las comunidades autónomas, teniendo en cuenta la población y reservando un 10% para cada una". Y las televisiones de pago tendrán que reservar un 30% del catálogo a obras europeas. La mitad (15%) tienen que ser obras en lenguas oficiales en España y, de esta subcuota, el 40% tienen que ser obras audiovisuales en alguna de las lenguas oficiales de las comunidades. Eso, para entidades como Òmnium Cultural o Plataforma por la lengua representa "pasos insuficientes" para la salud de las lenguas minoritarias como el catalán. Según aseguran, los cambios introducidos son claramente insuficientes y testimoniales al representar entre el 0,35% y el 2,55% del conjunto.