A partir del 1 de septiembre entrarán en vigor las nuevas restricciones para los líquidos que se pueden llevar en el equipaje de mano en los aeropuertos europeos. En la mayoría de estos aeropuertos se tendrá que volver a sacar los líquidos de la maleta al pasar los controles de seguridad. Estos cambios buscan estandarizar las regulaciones en toda Europa, aunque pueden suponer un retroceso temporal para los aeropuertos que ya habían implementado tecnología de escaneo avanzada. En un informe, la Comisión Europea cuestiona la fiabilidad de los nuevos escáneres de última generación que se han implementado en algunos aeropuertos del Reino Unido y los de Ámsterdam, Roma y Berlín, entre otros, y por eso se volverá a restaurar temporalmente la norma de los 100 ml y la separación de objetos.

En los aeropuertos españoles, solo en Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat se implementaron estos escáneres en 3D pero en fase de prueba, y por eso se mantuvo la limitación de los 100 ml, aunque no había que sacar los envases de la maleta, cosa que ahora se tendrá que volver a hacer. Eso puede provocar una ralentización de las colas porque ahora se tiene que separar de nuevo los objetos electrónicos y los líquidos del resto del equipaje y es muy probable que eso afecte a la fluidez con la cual los viajeros pasarán el control, por lo cual será recomendable llegar con más antelación al aeropuerto.

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Control de seguridad el aeropuerto de Barcelona (ACN)

Ventajas de los escáneres de última generación

Así, los aeropuertos que utilizaban este tipo de escáneres de última generación, conocidos como sistemas C3 EDSCB (Explosive Detection Systems for Cabin Baggage), que son mucho más caros que los tradicionales y también más costosos de mantener, tuvieron que realizar una importante inversión, pero contaban con la ventaja que los pasajeros podían llevar los dispositivos electrónicos y cosméticos en sus equipajes sin necesidad de sacarlos de la bolsa o maleta en caso de no facturarla. Además, los escáneres detectan los posibles explosivos, por lo cual se permitían los envases superiores a los 100 ml. A raiz de este informe de la Comisión Europea, los aeropuertos que ya utilizan el modelo C3 tendrán que volver al tradicional escáner de rayos X y mantener la limitación de los 100 ml.

Problemas técnicos en los C3

Los escáneres de equipaje de última generación, sin embargo, han presentado algunos problemas técnicos que han llevado la Comisión Europea a implementar restricciones temporales en su uso. Algunos de estos problemas son que los escáneres C3 no pueden garantizar la fiabilidad en envases con un contenido superior a 330 mililitros, como el de una lata de bebida. Eso quiere decir que hay un rango de medidas de envases que no pueden ser analizados con total seguridad. Además, la tecnología, a pesar de que es avanzada, todavía tiene dificultades para detectar con precisión componentes explosivos en ciertos tipos de líquidos o dispositivos electrónicos.

Por eso, la Comisión Europea ha mencionado la existencia de ciertos problemas técnicos que necesitan ser resueltos. Aunque no se han especificado detalladamente, estos problemas podrían estar relacionados con falsos positivos, porque el sistema podría estar identificando erróneamente objetos inofensivos como amenazas potenciales. Y también puede dar falsos negativos, dado que está la posibilidad de que no detecte adecuadamente todos los materiales peligrosos. Además, también pueden dar inconsistencias en el rendimiento y que el funcionamiento de los escáneres podría no ser uniforme en todos los aeropuertos o en todas las condiciones. Estos escáneres también se están utilizando o se planea su implementación a Ámsterdam, aeropuertos de Alemania, Irlanda, Italia, Lituania, Suiza, Suecia, Islandia, Noruega, Liechtenstein y Malta, y en otros aeropuertos del mundo, como el Tokio o en 15 aeropuertos de los Estados Unidos, como el de Las Vegas.

 

Estas medidas son temporales mientras se trabaja a solucionar los problemas técnicos identificados. La Comisión Europea colabora con los Estados miembros y la Confederación Europea de Aviación Civil para desarrollar soluciones técnicas que garanticen los más altos estándares de seguridad.

La nueva normativa:

  • Se mantiene el límite de 100 ml por envase individuales por líquidos, aerosoles y geles.
  • Los viajeros pueden llevar todos los envases de 100 ml que deseen, sin limitación por persona como antes.
  • Además de líquidos, se pueden llevar más productos cosméticos, incluyendo perfumes, cremas, maquillajes, champús y pasta de dientes, siempre que cada envase no excede de 100 ml.
  • En los aeropuertos europeos se tendrá que volver a sacar los líquidos de la maleta para pasar los controles de seguridad.