La Direcció General de Memòria Democràtica de la Generalitat de Catalunya ha exhumado los restos óseos de 15 soldados combatientes de la Guerra Civil en una fosa situada en el exterior del cementerio municipal de Bellaguarda (Les Garrigues). Se trata de soldados muertos durante los combates de la batalla de Les Garrigues, en Lleida, a raíz del avance de las tropas franquistas por Ponent, entre diciembre de 1938 y enero de 1939, que culminó con la ocupación definitiva de toda Catalunya y la posterior caída de los últimos baluartes de la República. En concreto, los objetos recogidos confirman la presencia de miembros del ejército sublevado, de regulares procedentes de Marruecos, pero no se descarta que también se enterraran otros soldados franquistas o incluso republicanos. De acuerdo con el protocolo vigente, todos los restos recuperados se someterán a estudios antropológicos y genéticos, con el objetivo final de poder identificar la identidad y devolverlas a las familias.

El director general de Memòria Democràtica, Alfons Aragoneses, ha explicado que disponían de fuentes orales y documentación que determinaban la existencia de la fosa, la mayor que ha abierto este año el Departament de Justícia, Drets i Memòria. Los trabajos arqueológicos sobre el terreno empezaron el 28 de mayo y se terminaron a finales del mes de junio. El espacio de excavación se sitúa en el camino que da acceso a la parte posterior del cementerio de Bellaguarda. "Los padres de algunos vecinos recordaban que se enterraron soldados en este lugar, pero no teníamos demasiado más información", ha explicado Aragoneses en declaraciones a la prensa.

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Intervención en la fosa de Bellaguarda / Ignasi Gómez

"Los restos óseos se han encontrado cerca de la superficie y presentan cierta erosión y compresión por la tierra a consecuencia del peso de los vehículos, como camiones y maquinaria, que han pasado por el camino a lo largo del tiempo", ha detallado una de las arqueólogas responsables de los trabajos de excavación, Izaskun Ambrosio. Sin embargo, consideran que la conservación es "lo bastante buena", con prendas de ropa y objetos, como botones, hebillas, calzado, que son compatibles con uniformes militares, por lo que se puede determinar que pertenecen a soldados. También se ha encontrado armamento diverso (balas y detonantes de granadas 'Lafitte') y objetos de atavío (dos anillos), y también personal, entre el cual destaca una mina de lápiz en el bolsillo derecho de la camisa de uno de los individuos.

Los objetos encontrados más destacables, sin embargo, son insignias y galones de cabo, correspondientes al Grupo de Regulares Indígenas de Tetuán (nº. 1), así como pulseras con la inscripción 'Tetuán' y el número de identificación. Por lo que todo apunta que hay miembros del ejército franquista procedentes de Marruecos. Sin embargo, los expertos que intervienen alerta que no se puede descartar la presencia de combatientes de otros orígenes o bando: una vecina del pueblo recuerda que en el muro había dibujadas medias lunas y cruces para señalizar las tumbas, hecho que podría indicar la presencia de soldados españoles.

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Intervención en la fosa de Bellaguarda / Ignasi Gómez

En todos los casos encontrados se trata de entierros individuales, con los cuerpos bien colocados en posición de decúbito supino. La mayoría presentan heridas por impacto de proyectil en el cráneo o en el tórax, en algún caso múltiple, hecho que podría ser compatible con el fusilamiento del que hablan algunas de las fuentes orales locales como posible causa de la muerte. No obstante, hace falta esperar a los resultados del estudio antropológico para tener una valoración más clara y plantear nuevas hipótesis, ya que, en algunos casos, se ha detectado la presencia de algún fragmento de metralla y politraumatismos que hacen posible su muerte combate.

En un caso, en donde se han encontrado dos botones, restos de calzado y algún fragmento de hueso, no había el esqueleto. Eso hace pensar a los investigadores que la tumba ha sido exhumada antes en algún momento. Ahora mismo, se desconoce todo lo que rodea esta circunstancia, no se ha encontrado constancia de esta exhumación previa.

Intervenciones en Ponent

Previamente a la intervención, las fosas fueron documentadas en el trabajo 'Documentación y ampliación del mapa de las fosas y la represión de la Guerra Civil y la dictadura franquista en Les Garrigues, Pla d'Urgell, Urgell y Segarra (2019)', encargado por la Direcció General de Memòria Democràtica con el objetivo de detallar los lugares donde podrían haber desaparecido muchos combatientes republicanos y represaliados del franquismo para encontrarlos y contactar con las familias. En octubre del año pasado ya se abrieron dos grandes fosas en la zona, en concreto en Bovera (Les Garrigues), donde Memòria Democràtica exhumó los restos de 26 soldados republicanos vinculados también a la ofensiva franquista por Ponent.

Aragoneses ha detallado que una gran parte de las fosas que quedan para intervenir en esta zona están dentro de los cementerios, por lo que el "riesgo de desaparición es menor", aunque calcula que quedan en torno a una treintena todavía para abrir fuera de los cementerios en la demarcación de Lleida. En este sentido, ha asegurado que "se está trabajando para abrir el máximo de fosas extramuros, pero tenemos que asumir que han pasado muchos años y algunas han desaparecido". "Eso puede ser porque se han visto afectadas por grandes lluvias o bien porque la memoria oral ha callado que encima se construyeron carreteras y otras infraestructuras", ha explicado. Además, "un número importante de los restos encontrados en la demarcación de Lleida y, sobre todo en Tarragona, fueron exhumadas para trasladarlas al Valle de Cuelgamuros", ha añadido.

Más de 900 fosas en Catalunya

En Catalunya, hay identificadas más de 900 fosas|fosos comunes de la Guerra Civil, según los últimos datos del Banco de la Memoria Democrática de la Generalitat (153, según los datos del Gobierno). Repartidas por todo el territorio catalán y la mayoría del cual se encuentra todavía sin intervenir o, incluso, sin encontrar, y de las cuales solo hay testimonios orales o estimaciones de las cuales de donde podrían ser. Buena parte de estas fosas se encuentran en Ponent y las Terres de l'Ebre, a raíz de las cruentas batallas que presenciaron estos lugares con la ofensiva de las tropas franquistas sobre el territorio catalán. El Departament de Justícia, Drets i Memòria de la Generalitat y su Comité Técnico de Fosas, creado por la Ley 10/2009, ejecuta las tareas de localización e identificación de las personas desaparecidas durante la Guerra Civil y la dictadura franquista, con el objetivo de dignificar sus restos.