Relevo natural al frente del Área de la Brigada Móvil (Brimo) de los Mossos d'Esquadra. Los antidisturbios de la policía catalana tendrán uno nuevo jefe, un nuevo, en el argot policial, Dragó 1. Quien hasta hoy era la jefe de la Brimo, el intendente Xavier Pastor, ha sido nombrado por la Prefectura como nuevo jefe de la División de Intervención, que sirve para englobar, bajo la batuta del intendente Hueso, que lidera la Comisaría General de Intervención, las unidades de intervención. Con este ascenso de Pastor, queda vacante la posición de jefe de la Brigada Móvil y está previsto que la Prefectura nombre al inspector Fran Alcaide.

Se trata de un relevo natural. Hasta ahora el inspector que asumirá la dirección de la Brimo era el segundo del Área y uno de los hombres más operativos de esta unidad antidisturbios de la policía catalana y siempre vinculado a las jefes anteriores. Hasta ahora asumía la dirección operativa y era uno de los mandos que siempre, en dispositivos grandes, estaba a pie de calle.

El nuevo jefe de la Brimo, cuando sea nombrado -que se espera que se pueda hacer cuando se haga con todos los nuevos inspectores de esta última promoción, que tendrán que recibir nuevo destino-, también tendrá refuerzos en el hueso directivo de la Brimo, con un nuevo inspector que asumirá la subdirección del Área. El relevo es continuista y será cero traumático para la Brimo, teniendo en cuenta que el futuro Dragó 1 es un hombre de orden público, de los mejores técnicamente que tiene la policía de Catalunya. El impulso técnico y estratégico que hizo la Brigada Móvil bajo la batuta del intendente Carles Hernández y el ahora intendente Víctor Martín, no se entendería tampoco sin la figura de Alcaide, siempre vinculado a esta especialidad.

Los retos del nuevo jefe de la Brimo

El trabajo de la Brigada Móvil, por la repercusión mediática que tienen sus actuaciones en materia de orden público, lo convierte en una unidad permanentemente analizada e, incluso, cuestionada. Además de eso, el reto que asumirá el inspector Alcaide no es fácil. Hay que recordar que el Govern, por presión de la CUP, creó al Parlament una comisión de análisis del modelo policial catalán que derivó en una enmienda casi a la totalidad en el modelo de orden público, si bien la Prefectura y los técnicos lo defendieron.

Imagen de una de las últimas actuaciones de la Brimo, en el centro de Barcelona / Foto: Carlos Baglietto

Las conclusiones de esta comisión acabaron con las instrucciones del Parlament de evitar el uso de escopetas de foam en los equipos de orden público, una sustitución que se hará, si bien va para largo,  cuándo se pueda encontrar una nueva herramienta que permita guardar distancia con los alborotadores en incidentes de orden público. Estas lanzaderas ya han estado en el ojo del huracán después de la eliminación, por parte también del Parlament, de las escopetas de pelotas de goma. Los Mossos mantienen que las retirarán, haciendo caso al Parlament, pero que necesitan, antes, encontrar una herramienta que evite, siempre que se pueda, que el enfrentamiento con los violentos tenga que ser cuerpo en cuerpo, con defensas, que tiene consecuencias todavía más lesivas. Esta semana seis agentes de la Brimo resultaron heridos en los disturbios que provocaron a los ultras de la Amberes.

La Comisaría General de Intervención

El intendente Xavier Pastor ha sido nombrado jefe de la División de Intervención y liderará ahora las diferentes unidades de alta especialización como la misma Brigada Móvil, el Grupo Especial de Intervención (GEI), el TEDAX y el área técnica de Intervención y también el Área Central de Apoyo Operativo. La División de Intervención forma parte de la Comisaría General de Intervención que lidera el intendente Miquel Hueso y que incluye, además de la División de Intervención, también el Área Penitenciaria, el Área Aérea y el Área Marítima. Esta división que ahora comandará Pastor -que ha liderado la Brimo desde 2019 y que tiene experiencia en mediación, una unidad que creó y dirigió, antes de acabar como jefe de los antidisturbios-, es una de las nuevas que se han creado con el nuevo organigrama de los Mossos de cara a fortalecer el cuerpo para 2030. Con la nueva hornada de intendentes también ha habido cambios en varias unidades del cuerpo, como también en la comisaría de Ciutat Vella, que lo ha asumido Víctor Martín.