La nutria ha vuelto a dejarse ver en el tramo bajo del río Llobregat, cerca de la desembocadura. Y es que desde el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) han conseguido imágenes del mamífero de noche. Concretamente, la grabación se ha producido durante los trabajos de análisis de conectividad ecológica que se están llevando a cabo en el valle bajo del río Llobregat en el marco de las competencias de recuperación socioambiental y gestión de los espacios fluviales.
La última vez que se encontraron rastros de nutria fue en febrero de 2020 en la zona de Castellbisbal, aguas arriba. Este año, sin embargo, se ha avisado el animal a kilómetros abajo, hecho que demuestra que el río Llobregat tiene una buena conectividad ecológica. Es decir, es un verdadero corredor que utilizan las especies para moverse en un territorio muy fragmentado por diferentes infraestructuras (AP-7, A-2, red ferroviaria...).
Declaraciones de Patrícia Rodriguez, bióloga del Servei d'Infraestructures de l'AMB/ AMB
Que se haya podido volver a ver la nutria en el río Llobregat es una muy buena noticia para la biodiversidad de este espacio. Una prueba más que se está avanzando en materia de salud y calidad ambiental del río Llobregat. Y es que la estrategia de recuperación y transformación del río Llobregat es una pieza clave de la infraestructura verde metropolitana. Las especies de flora y fauna tienen un papel clave en el ecosistema del Llobregat. Allí, ha quedado demostrado que la conservación es compatible con el uso social del río.
Hábitats y evolución de la nutria
Las nutrias son mamíferos carnívoros semiacuáticos. Habitan ríos, lagos, lagunas y pantanales con buena calidad del agua. Es por eso que la nutria se considera un bioindicador del estado de los sistemas fluviales. El año 1973 se constató el peligro de extinción de esta especie de mustélido. Consiguientemente, fue protegida a todo el Estado Español. Está clasificada como especie de interés especial en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas (Real Decreto 439/90) y en Catalunya es una especie protegida dentro de la categoría A (Ley 3/1988).
Para favorecer la protección de la nutria, desde el 2002, Catalunya dispone del Pla de conservación de la nutria. Hoy día, la nutria es muy presente en el río Segre, la Noguera Pallaresa y la Noguera Ribagorçana, a la vez que también hay importantes poblaciones en la Muga, el Fluvià y el Ter. Cabe decir que en el nuevo Catálogo de especies amenazadas de Catalunya, que está pendiente de aprobación, la nutria ya no figura como especie amenazada. No obstante, seguirá siendo una especie protegida.
Con todo, según el informe del Estado de la naturaleza en Catalunya del año 2020, realizado por el Observatorio del patrimonio natural y la biodiversidad, la reintroducción de ejemplares de nutria de 1995 en el 2001 en el nordeste de Girona, contribuyó a recuperar la especie en buena parte de las cuencas, especialmente de Girona y Barcelona.
En los últimos años, la nutria ha ido ganando terreno en la metrópolis de Barcelona y se ha podido ver en diferentes puntos del río Besòs y el río Llobregat. De esta manera, el AMB constata la continua presencia de la nutria en el territorio y una mayor movilidad de estos mamíferos.