Catalunya ha registrado una ola de calor intensa y general entre el lunes y el viernes, con temperaturas máximas que han superado los 40 grados en varios sectores del interior, el prelitoral y puntos de la Costa Brava. Por suerte, no ha sido tan intensa como la de finales de agosto del año pasado ni se han registrado máximas tan extremas como las del 18 de julio de 2023 (45 grados). En cualquier caso, el miércoles fue el día de calor más intenso en buena parte del país, sobre todo en las comarcas del noroeste, con máximas de 41 a 43 grados en el Empordà, el Pla de l'Estany y la Garrotxa. Estas han sido las temperaturas máximas de los últimos días.

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Según el balance del Servei Meteorològic de Catalunya (Meteocat), la ola de calor de esta semana ha dejado un pico de hasta 43,2 grados en Cabanes (Alt Empordà). Entre el 31 de julio y el 1 de agosto, también se han registrado temperaturas máximas de 42,6 grados en Maià de Montcal (Garrotxa); 42,5 en Banyoles (Pla de l'Estany); 42,3 en Sunyer (Segrià); 41,7 en la Bisbal del Empordà (Baix Empordà) y en Roda de Ter (Osona); y 41,6 en Castellbisbal (Vallès Occidental).

Ola de calor y temperaturas máximas

Así, la temperatura más alta de este episodio no se ha registrado en lugares típicamente más calurosos del país, como comarcas de Ponent y vall de l'Ebre: se ha registrado en el extremo noroeste. El viento de ábrego que sopló el miércoles impidió el efecto moderador de la marinada, hecho que permitió que la temperatura rozara los 40 grados junto al mar y se alcanzaran los 43 al Alt Empordà. El Meteocat ha indicado que son aproximadamente los mismos lugares que el 18 de julio del 2023 llegaron a los 45 grados, temperatura hasta entonces insólita en Catalunya.

Entre el martes y miércoles, cuatro de las 147 estaciones de la red automática (XEMA) y de las maunales (XOM) con más de 20 años de datos han igualado o superado la temperatura máxima absoluta de toda su serie. Son el Observatori Fabra de Barcelona, donde se alcanzaron los 40 grados por primera vez en sus 110 años de datos; Torroella de Fluvià, que igualó los 43 grados del 18 de julio del año pasado; la Tallada d'Empordà, que llegó por primera vez a los 41,1 grados; y Sant Pere Pescador, con un máximo de 40,5 grados.

Alerta por lluvias

Por otra parte, la persistencia del calor ha implicado que varias estaciones del interior hayan registrado 40 grados de máxima durante tres días consecutivos —incluso, cuatro en puntos del Pallars Jussà y del Segrià—. Más allá de los registros por encima de los 40 y de los récords, la temperatura máxima ha superado el umbral de peligro por calor intenso al menos un día a la gran mayoría de estaciones de la XEMA (159 de 185 estaciones) y ha llegado a cuatro días a sectores del nordeste, del Vallès y de Ponent, los sectores donde la ola de calor ha sido más intensa. En cambio, estaciones de la vall de l'Ebre, del Priorat y la Conca de Barberà, así como puntos aislados del Pirineu y Prepirineu, no han llegado a superar el umbral. En estos lugares, el Metecoat ha indicado que el calor no se puede calificar de ola de calor.

Hay que recordar que Protecció Civil ha activado la alerta Inuncat por la previsión de lluvias intensas a partir del mediodía de este viernes. El Meteocat augura precipitaciones que pueden superar los 20 litros por metro cuadrado en veinte minutos a muchos puntos de Catalunya, con afectación especial en las comarcas del Pirineu y Prepirineu, la Catalunya Central y la Terra Alta. En las comarcas del Bages, Berguedà, Lluçanès y Ripollès, se podrían superar los 40 litros por metro cuadrado en treinta minutos. Los chaparrones pueden ir acompañados de tormenta, fuertes rachas de viento y localmente de piedra.

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